El gasto en sueldos y salarios de los empleados públicos de la Administración General del Estado se elevó un 10% en los cinco primeros meses del año, debido principalmente a la equiparación salarial de las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado con los cuerpos policiales autonómicos y al incremento retributivo acordado para 2019 del 2,25%.
Así figura en el último informe sobre los principales indicadores del Estado elaborado por la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), recogido por Europa Press, en el que se muestra que los gastos de personal aumentaron un 7,9% entre enero y mayo, hasta los 6.333 millones de euros.
Dentro de estos, los sueldos y salarios se elevaron un 10%, como consecuencia principalmente de la equiparación salarial de las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado con los cuerpos policiales autonómicos, con un gasto a finales de mayo de 210 millones, y al incremento retributivo acordado para 2019 del 2,25%, que se aplica sobre el importe de las retribuciones vigentes en diciembre de 2018, que recogían a su vez una subida salarial del 1,75%.
480 millones más
En detalle, el gasto en sueldos y salarios del personal activo de la AGE ha pasado de los 4.818 millones en los cinco primeros meses del año en 2018 a los 5.298 millones, lo que supone un alza del 10% (480 millones más).
El Gobierno calcula que la subida salarial de este año a los empleados públicos costará aproximadamente 3.625 millones de euros, de los que casi 2.100 millones serán asumidos por las comunidades autónomas, en las que trabaja más de la mitad del total de funcionarios de España, según la memoria histórica del real decreto-ley que aprobó el incremento retributivo.
En 2018 el incremento salarial fue hasta junio del 1%, señala el informe. Por otro lado, las cotizaciones sociales descendieron en los cinco primeros meses del año un 1,7%, por los menores pagos a Muface.
Solo en el mes de mayo el gasto de personal se elevó un 11,7%, hasta los 1.300 millones, y dentro de estos el relativo a los sueldos y salarios se incrementó un 10,8%, hasta los 1.055 millones.