Cultura

Las claves del románico más allá del Claustro de Palamós

El descubrimiento del claustro revive el interés mediático sobre el patrimonio románico, al que muchas instituciones han dedicado años de trabajo y esfuerzo, entre ellos el Proyecto Románico Norte, en Burgos y Palencia.

El reciente descubrimiento del Claustro de Palamós ha atraído el interés mediático sobre el patrimonio románico, uno de los campos de trabajo donde mayor esfuerzo se ha concentrado en los últimos años y que sin embargo salta hoy a la palestra pública como si de una novedad se tratara.

Uno de los proyectos que mayor atención y recursos ha dedicado a la investigación y  conservación del arte románico en sus zonas históricas ha sido el Proyecto Románico Norte. Se trata de una iniciativa promovido por la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, a través de la Fundación Santa María la Real, que cuenta además con la colaboración de las Diócesis de Palencia y Burgos.

El objetivo fundamental del proyecto, enmarcado en el Plan PAHIS de intervención en el Patrimonio Histórico de Castilla y León, es la restauración integral de 54 iglesias románicas y sus entornos en las provincias de Palencia y Burgos, en el territorio que siglos atrás conformaba la Antigua Merindad de Aguilar de Campoo. El presupuesto global del Plan asciende a 9.720.000 euros, aportados por la administración regional.

Este proyecto se inició en el año 2005. Hasta ahora se han realizado 176 intervenciones . Esto supone la ejecución del 75% del presupuesto del Plan y, se espera que cuando termine el presente ejercicio se haya superado el 80% de ejecución en edificios, entornos y bienes muebles.

A lo largo de sus siete años de trabajo, el Plan Románico Norte  ha servido incluso de modelo y se han implantado programas similares en Soria, Zamora, la zona limítrofe con Portugal y próximamente se trabajará con el Románico Mudejar. También ha sido pionero en toda España y Europa pues su característica principal es la conservación del patrimonio en conjunto con la sociedad.

Para  los técnicos del Proyecto Románico Norte es fundamental que la sociedad sea partícipe y comprenda no solo el trabajo, sino también la importancia de restaurar y conservar el patrimonio histórico como un elemento generador de desarrollo, de ahí que sobre cada acción de restauración se generen acciones didácticas, educativas y en general eventos públicos que integren a la comunidad con el monumento. “Intervenimos y lo contamos” ha sido su lema de Románico Norte. Comunicar va mucho más allá de imprimir folletos informativos dicen quienes organizan este proyecto.

Principales  intervenciones y monumentos

Aunque todas y cada una de las intervenciones tienen igual importancia para el equipo de Románico Norte, hay algunas que merece la pena reseñar por su significado o porque han supuesto un antes y un después en la restauración de edificios históricos.

Durante el último año, se ha concluido la restauración de la iglesia de Santa María de Mave (Palencia), con la realización de una intervención  con seguimiento arqueológico en la entrada principal del templo. De este modo, se ha conseguido rebajar la cota del suelo, permitiendo  que la portada recupere su altura original y dotando de mayor magnificencia al conjunto.

Además, gracias a la implantación en el edifico del MHS (Sistema de Monitorización del Patrimonio), se han instalado sensores inalámbricos del tamaño de un pequeño diccionario de bolsillo en puntos estratégicos, que permiten controlar parámetros como la humedad relativa o la temperatura. Estos datos, convenientemente registrados e interpretados, facilitan la conservación preventiva de la iglesia y de sus bienes muebles.

Por otro lado, se ha establecido, gracias a la colaboración de País Románico y al proyecto Ruralab, un sistema de tarjetas, que permite el control remoto de las visitas. Igualmente, se han diseñado folletos informativos, que llevan insertado un código QR, a través del cual el turista puede descargar y escuchar en su móvil una audio guía. Se ha renovado todo el sistema de iluminación, permitiendo la creación de diferentes ambientes en el templo.

Otra intervención destacada, ha sido la llevada a cabo en la iglesia de San Andrés en la pequeña localidad palentina de Cabria. Aquí, no sólo se ha actuado en el edificio con la restauración de las cubiertas de naves, sacristía y pórtico, sino que también se ha llevado a cabo el acondicionamiento de los entornos. También se ha recuperado una talla de madera policromada, que representa a la Virgen con el Niño, realizada a finales del siglo XIV. 

En la provincia de Burgos, cabe destacar, sin duda, las intervenciones llevadas a cabo en las localidades de Ailanes y San Miguel de Cornezuelo. En la primera, se han solventado los graves problemas estructurales y de humedad que presentaba la iglesia de San Cristóbal, de origen románico y, se ha consolidado, igualmente, una pequeña ermita cercana, dedicada a la Virgen de la Cuesta. En la segunda, se ha ejecutado la restauración de la iglesia de San Miguel Arcángel.

Estas no son las únicas, hasta la fecha se ha intervenido en 54 templos incluidos en el plan, lo cual incluye no sólo la restauración y adecuación de los entornos sino también la restauración de  más de cincuenta piezas de arte mueble en las 31 las iglesias incluidas en el plan, además de esculturas exentas en madera y piedra, retablos, lienzos y pintura mural.

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