Ni siquiera tener los ojos más bonitos de Hollywood y la sonrisa más deseada te garantiza nada en esta vida. Paul Newman, uno de los mejores actores de la historia de cine, un actor que alcanza la categoría de leyenda y por el que la mayoría de los hombres nos gustaría cambiarnos, fue un ser atormentado. Hablamos de su vida en 'cine en blanco y Negrete' con motivo de la publicación de su biografía en la editorial Cúpula: 'La extraordinaria vida de un hombre corriente'.
El libro refleja las conversaciones mantenidas años antes de su fallecimiento con el mejor amigo de Paul, Stewart Stern, que también entrevistó a múltiples amigos y conocidos del artista. Paul Newman nació en una familia de clase alta en Shaker Heights, Ohio, en 1925. Nunca le faltó alimento, ni caprichos, pero sus relaciones con sus padres fueron mejorables. Su padre fue un alcohólico.
Quizá el momento en que más se abrió fue tras conocer la muerte de su hijo por sobredosis, un golpe del que el actor no llegó a recuperarse nunca. "Éramos muy parecidos", escribe el actor. Newman concluye el libro con unas sórdidas palabras: "La incertidumbre ha sido una constante para mí. Siempre he estado herido, siempre he necesitado ayuda". No se pierdan las peripecias de uno de los actores de nuestra vida.