Las obras de autores contemporáneos, como Alfredo Sanzol, Miguel del Arco y Albert Espinosa junto a Marta Buchaca, Jordi Casanovas, Marc Rosich y Jorge Picó, protagonizan la primera mitad de una temporada teatral en Cataluña, marcada por los recortes presupuestarios.
El Teatre Lliure abrirá sus puertas el 13 de septiembre con la obra Litus, de Marta Buchaca, que salta de una pequeña sala de 40 localidades al Espai Lliure, de 172, gracias al éxito de público que consiguió la pasada temporada.
La dramaturga catalana, de 32 años y autora de obras tan bien acogidas por el público como El año que viene será mejor, narra la historia de un grupo de amigos treintañeros, cada cual con sus problemas existenciales, que se enfrentan a la trágica muerte de Litus, un amigo común.
La nueva temporada oficial del Teatre Lliure se iniciará, no obstante, en octubre, con el estreno en Montjuïc de Songs of wars I have seen, y Livingstone, bajo la creación y dirección de Sergi López y Jorge Picó. Mientras, el montaje Pàtria, de Jordi Casanovas, se exhibirá en la sala del barrio de Gracia.
Un espacio que también acogerá Juicio a una zorra, del 24 de noviembre al 16 de diciembre, donde Miguel del Arco dirige a Carmen Machi. El Teatre Nacional de Catalunya (TNC), que también acogerá a Casanovas, apuesta por "autores vivos de alrededor de 40 años", según ha anunciado el director artístico Sergi Belbel, que se despide del cargo tras siete años al frente de este teatro público catalán.
Albert Espinosa, Marc Rosich y Pere Riera son algunos de los autores contemporáneos que en la temporada 2012-2013 estrenarán en la Sala Gran del citado teatro. Frente a tal cantidad de obras de creadores jóvenes catalanes en espacios de gran aforo de la ciudad de Barcelona, la Sala Becket, cuya razón de existir es la promoción de la dramaturgia contemporánea, ha optado por autores vivos, pero extranjeros.
Tres italianos ocuparán la Beckett este otoño: Davide Carnevali, Spiro Scimone y Antonio Tarantino.Otra sala que tradicionalmente programa jóvenes autores autóctonos, como la Villarroel, mantiene el mismo criterio en su programación 2012-2013 e inicia la temporada con la reposición de la obra de teatro-danza "Dios Menguante", de Mar Gómez.
Otra reposición, Luces de Bohemia, volverá a la Biblioteca de Catalunya el próximo 19 de septiembre de la mano de la compañía La perla 29, que dirige Oriol Broggi.Este mismo autor también repondrá Incendis en el Teatro Romea en diciembre, en lo que parece una tendencia generalizada entre los teatros, que prefieren retomar obras que ya han demostrado su capacidad de atraer público en lugar de arriesgar con nuevas producciones.
La crisis planea en todas las programaciones, como ha reconocido el director del Teatre Lliure, Lluís Pasqual, que ha reducido el número de espectáculos y ha prescindido de las compañías internacionales. En la misma línea, el Festival Temporada Alta de Girona y Salt, que abrirá Alex Rigola el próximo 4 de octubre, reducirá el número de montajes de los 94 del año pasado a 60 este año.
Este certamen ya ha confirmado la presencia de obras ya estrenadas y de éxitos como "Dubte", "L'habitación blava", "Incendis", "Forever young" o "Splenda", así como el estreno de "Aventura!", la nueva obra de la compañía T de Teatre que ha escrito Alfredo Sanzol, que se exhibirá también en el Lliure.
En la programación de todas las salas teatrales, se observa un incremento de las obras con pocos actores en escena, ya que los grandes montajes viven horas bajas. Asimismo, las comedias siguen siendo un buen antídoto contra la crisis, tal como defienden los programadores del Teatro Borras, que inician temporada con "Toc Toc", o del Teatro Coliseum, que recibe septiembre con el humorista Carlos Latre.
