Muchos todavía no se dan cuenta, pero estamos viviendo una edad de oro de la música latina, quizá la más brillante de todas. Parte de la responsabilidad, sin duda, es de la colombiana Carolina Giraldo Navarro, más conocida como Karol G, que ha entado en la treintena más inspirada que nunca. El nivel de la música urbana en nuestro idioma es tan alto que Mañana será bonito (Bichota season) no impresiona ni descoloca, pero contiene temazos enormes para levantar cualquier pista de baile. Hoy mantener el voltaje ya es triunfar. Estas son las cinco claves para comprenderlo un poco mejor:
Conexión con Selena
Una de las grandes bazas del disco es “Mi ex tenía razón”, una cumbia electrónica que en realidad es un homenaje a Selena Quintanilla, reina texana del género que destacó por su canciones a corazón abierto y su trágica vida (Netflix le dedicó una serie hace tres años). Frase clave de la letra, afilada como un puñal: “mi ex tenía razón, dijo que no iba a encontrar uno como él y encontré uno mejor”. Aparte de que la canción es preciosa, viene como el salseo de que Anuel AA (ex de Karol G) está rabiando por la ruptura, a pesar de tener nueva novia Incluso ha fabricado merchandising donde se burla del nuevo novio de Karol, el también cantante Feid. La bichota borda este ejercicio de estilo y nos hace preguntarnos si la cumbia puede volver con fuerza en 2024, como alternativa a los reguetones, bachatas y merengues, dominantes en la actualidad.
Diva disponible
Aunque Karol tiene pareja actualmente, está claro que compuso el disco desde la perspectiva de quien rompe una relación larga y vuelve al mercado del ligoteo. Se nota por ejemplo en la explícita “Dispo”, abreviatura de ‘Disponible’, cuyos primeros versos no dejan lugar a dudas: “¿Qué le habrán hecho a esa bebé que está ‘rebelá'?/ No le gustaba ante' prender y ahora sin miedo quema/¿Será que terminó con él? Por hijo e' puta o por infiel”, canta de manera majestuosa. Toda la canción contagia química y feromonas, gracias también a las aportaciones de la invitada Young Miko y de uno de sus productores más fieles, Ovy on the drums.
Remezclotes
El disco crece también gracias a dos grandes remezclas de temazos conocidos: “Una noche en Medellín” y “Provenza”. Ambas tiran de artillería electrónica y salen reforzadas del experimento. La primera es un pepinazo de Cris MJ que habla de darlo todo saliendo en la ciudad natal de Karol, con un ritmo que derrite las caderas. Para la remezcla se apunta el joven Ryan Castro, otro artista de la ciudad. “Provenza”, inspirada en la calle con tiendas más cara de Medellín, fue estrenada ya en Tomorrowland 2022 y cumple su función de himno para grandes recintos.
Colombia y más Colombia
El disco coge intensidad pronto con “Bichotag”, con una base que recuerda a la era dorada de la rapera Missy Elliott. Dicho esto, la identidad latina no se negocia: el tema arranca con Karol diciendo la frase “Oh my God, this is so amazing” (“Dios mío, esto es increíble”) con un acento colombiano tan fuerte que resulta cómico (de hecho, se hizo viral en TikTok por esto). “Qlona” es otro reguetón de homenaje a las mujeres de formas redondeadas, que saben disfrutar de su sexualidad al estilo caribeño. Karol nunca correrá el riesgo de parecer una estrella pop globalista que lo mismo podría ser de Londres que de Lausana porque sus raíces se notan cada pocas rimas.
Reguetón de antes
Aunque no invente la pólvora, otro momento destacable es “Gatita gángster”, un perreo que remite a la edad de oro del género, a mediados de la década de los dosmiles. Karol opta por un ritmo más pausado que el de aquellos años, pero se saca de la manga un fraseo cálido y venenoso que se te mete muy dentro del cuerpo. “Lo nuestro e' amor de ante' (de ante' de)/ Baby, dámelo pa' recordarte (ven, bebé)/ Sabes que soy tu gatita gángster/La que entre to'a está por delante”. Un caramelo para los que sentimos nostalgia cada vez que recordamos aquellas recopilaciones de Vale Music que nos abrieron las orejas a Puerto Rico.
