Allá donde va... Esta semana Javier Bardem levantó polémica con unas declaraciones que hizo en París, al evocar las palabras de un embajador francés en Estados Unidos, quien le dijo en 2011 que Marruecos era para Francia "una amante con la que se duerme todas las noches, de la que no se está particularmente enamorado pero que se debe defender". Sus revelaciones, al hilo de su documental Hijos de las nubes. La última colonia. Las palabras del español levantaron desde protestas hasta tensión diplomática.
La respuesta oficial ocurrió este jueves. El gobierno de Marruecos cree que el actor español Javier Bardem "lleva desde octubre en campaña contra Marruecos". Solo así se explican sus últimas declaraciones citando una confidencia. En su rueda de prensa semanal, el portavoz del Gobierno marroquí, Mustafá al Jalfi, criticó el documental producido por Bardem Hijos de las nubes. La última colonia, que trata sobre el conflicto del Sáhara Occidental. Aseguró el representante que "no es un documental" porque "carece de objetividad" y "es unilateral".
Hace dos años, cuando se presentó el documental, tanto Bardem como el director Álvarro Longoria aseguraron que algunos políticos descartaron participar en el documental porque es un asunto "muy peliagudo", Ninguna autoridad de Marruecos quiso hablar. "Es una pena porque no es una película dogmática y queríamos contar con todas las opiniones", dijo entonces Javier Bardem sobre la cinta, que centra su discurso en las carencias del Sáhara occidental, la última colonia africana según Naciones Unidas. Una nación al borde de la guerra.
No opinan lo mismo del otro lado. Según el portavoz marroquí, Bardem solo da voz en el documental "a personalidades conocidas por su hostilidad a Marruecos y su integridad territorial", y además omite mostrar lo que para Marruecos son las violaciones a los derechos humanos en los campamentos de Tinduf. Bardem dijo hace una semana en París que un embajador francés le había comentado en 2011 que para Francia Marruecos es como "una amante con la que se duerme todas las noches, de la que no se está particularmente enamorado pero que se debe defender", y eso explicaba la defensa francesa de la tesis marroquí sobre el Sáhara.
Según el portavoz marroquí, Bardem solo da voz en el documental "a personalidades conocidas por su hostilidad a Marruecos y su integridad territorial".
Sobre las recientes palabras del actor, el postavoz marroquí hizo algunos comentarios. Esas declaraciones de Bardem se produjeron el mismo día en que siete policías franceses se presentaron en la residencia del embajador marroquí en París para tomar declaración al jefe del contraespionaje de Marruecos, Abdelatif Hamuchi, por su supuesta complicidad en actos de tortura contra dos residentes en Francia, desatando una crisis entre Rabat y París. "La coincidencia de ambos hechos -las declaraciones de Bardem y la visita de los policías- nos plantea algunos interrogantes", dijo el ministro.
Yo, Bardem
Acostumbrado a no quedar jamás al margen de las polémcias políticas y sociales, Bardem ya suma una larga lista de incidentes inflamables, el más reciente, cuando llamó a José Ignacio Wert ministro de "anti-cultura" en la 33 Gala de los Premios Goya. Desde que vivió en su propia carne la grave situación del Sáhara hace cuatro años, dice, sintió la necesidad de ayudar a sus habitantes. El resultado de esa pulsión emocional se tradujo en el documental Hijos de las nubes, la última colonia, que dirige Álvaro Longoria.
En esta película documental protagonizada y producida por Javier Bardem, se examina la agitación política actual del norte de África y la responsabilidad de las potencias occidentales y expone cómo determinadas decisiones políticas han generado y ocasionado gran violencia y caos. En su estreno durante 2012, a la sazón de la crisis económica actual, Bardem aseguró que la crisis "merecería un documental", donde "los malos son los bancos" y "los buenos el tipo que está en paro tiene dos hijos y no lleva capa ni vuela, pero que está sacando a la familia adelante sin tener un duro, y que debido a las grandes trampas que nos han hecho está pagando las consecuencias", explica el actor.
El documental, ganador de un Goya, nació según el actor como una "responsabilidad histórica" por el mismo hecho de ser españoles. Su visita hace cuatro años a los campamentos en Marruecos le marcaron, asegura. Apelando a los sentimientos, manifestó en su momento Bardem que no conseguía olvidar a ese niño que le despertaba por las mañanas y a todos aquellos que le abrían su casa y su hogar. "Además nunca hay un afán de convencerte de nada; te cuentan lo que quieres escuchar pero no están para que te alinees a su causa", alega Javier Bardem. Se convirtió el actor en portavoz de la dignidad de los saharauis que vivía situaciones tan extremas. "La idea del documental nació de una necesidad real de ver cómo podíamos echar una mano a esta gente", reconoce.
