Los emoticonos y emojis se han alzado con la distinción de palabra del año 2019 que otorga Fundéu BBVA desde hace siete años, según ha informado la fundación en un comunicado.
La Fundéu BBVA ha cedido a los emoticonos y emojis la distinción de palabra del año por su "innegable" impacto en la vida cotidiana, sus "interesantes" relaciones con el resto de los elementos que conforman la comunicación (palabras, frases, signos de puntuación) y las perspectivas que se abren de cara al futuro.
Asimismo, ha destacado que la aparición en los años 90 de los emoticonos (pequeños dibujos creados con signos ortográficos) y su evolución durante el siglo XXI hacia los emojis (pequeñas figuras dibujadas con valor simbólico).
"No se trata de que los emoticonos y los emojis vengan a robarnos palabras o a pervertir nuestra lengua, que ha mostrado durante siglos su capacidad para adaptarse a los nuevos tiempos y a las tecnologías de cada época. Ni de que acabemos expresándonos solo con este tipo de elementos. Creemos más bien que constituyen un elemento más que contribuye a lograr el fin último de las lenguas: la comunicación entre las personas", ha señalado el coordinador general de la Fundéu BBVA, Javier Lascuráin.
¿Por qué no es una palabra?
"Porque han llegado para quedarse, porque todos los empleamos con naturalidad en las conversaciones más espontáneas del día a día, porque conviven en armonía integrados en nuestra lengua y porque el español no debe temerle nunca al progreso, la Fundéu ha querido que en 2019 los emoticonos y emojis ocupen el lugar de su palabra del año", ha añadido por su parte Judith González Ferrán, filóloga de la Fundéu, en un texto para la agencia Efe en el que explica por qué en realidad los emojis no pueden ser considerados una palabra.
González ha ensalzado la capacidad de los emojis para "comunicar la mayor cantidad de información en el menor tiempo posible" y ha defendido que eso "hace que todos recurramos diariamente a esos pequeños elementos que, al alcance de nuestra mano y nuestros dedos, condensan gran parte de lo que queremos decir en el espacio que ocupa tan solo un carácter".
"Los emoticonos o emojis hacen que se tarde menos en insertar una pequeña mano con un pulgar hacia arriba que en escribir «sí, de acuerdo» y que se comunique exactamente lo mismo", ha añadido.
Otras palabras del año
Es el séptimo año que la Fundéu anuncia a la ganadora como palabra del año tras elegir escrache en el 2013, selfi en el 2014, refugiado en el 2015, populismo en el 2016, aporofobia en el 2017 y microplástico en el 2018.
La elección de la palabra del año de la Fundéu BBVA, que llega en este 2019 a su séptima edición, es el fruto de los debates de sus integrantes (filólogos y periodistas) tras un año de trabajo con el lenguaje más relacionado con la actualidad informativa.