Después de Manual de resistencia, el libro en el que Pedro Sánchez glosa su travesía del fracaso a La Moncloa, Planeta abre el curso literario con títulos escritos por políticos. Aunque particularmente ruinosas, retoma la línea de memorias, esta vez las del político popular Jorge Fernández Díaz, así como un nuevo ensayo político firmado por Alberto Garzón. Ambos serán publicados por Península, que pertenece al grupo editorial.
A juzgar por las cifras de ventas, la publicación de memorias políticas funcionan más como un instrumento de lobby que como una apuesta editorial. Planeta ya ha tenido sus aciertos: Nadie es más que nadie (Espasa), del expresidente cántabro Miguel Ángel Revilla, se mantuvo más de 30 semanas entre los más vendidos. El Manual de Pedro Sánchez, aunque no lo iguala, alcanza ya la sexta edición.
En Cada día tiene su afán, el título elegido por Jorge Fernández Díaz para sus memorias, el político popular cuenta el inicio de su carrera como gobernador civil, así como su paso por UCD, CDS, Alianza Popular y el Partido Popular. El exministro de Interior también aporta detalles sobre su religiosidad. Según un curioso reclamo del texto de contracubierta, en este libro Fernández Díaz habla de su conversión en Las Vegas. Habrá que esperar hasta octubre para salir de dudas.
El líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, en su línea de ensayos breves dedicados a la política, publica ¿Quién vota a Vox? un libro de Península en el que Garzón explica de qué forma el PP, Ciudadanos y Vox seducen a las clases medias. "¿Qué está sucediendo? ¿Es verdad que la clase trabajadora es la responsable de estos fenómenos? ¿Dónde están y qué hacen realmente las organizaciones de izquierdas que dicen representar y defender a la clase trabajadora?". Esas son, según sus editores, algunas de las preguntas que plantea.
Memorias, ensayos y otras ruinas
A finales de 2013, José Bono publicó el primer tomo de sus memorias: Les voy a contar (Planeta), casi mil páginas. Se vendieron 15.000 ejemplares, una cantidad modesta, si se toma en cuenta que el socialista recibió de la editorial 800.000 euros. A día de hoy, el libro no sobrepasa los 80.000 ejemplares vendidos. A esa siguió Diario de un ministro, en cuyas páginas Bono se centra en su etapa como ministro de Defensa entre 2004 y 2006. El resultado tampoco fue especialmente bueno.
También José María Aznar publicó sus memorias, de las que vendió alrededor de 30.000 ejemplares . A esas siguieron las memorias de Alfonso Guerra, en cuyas páginas el político socialista cargaba contra todo y contra todos: desde Felipe González y José María Aznar hasta Manuel Chaves o Baltasar Garzón, lo cual llevó al libro a mantenerse cinco semanas entre los más vendidos. José Luis Rodríguez Zapatero publicó El dilema. 400 días de vértigo, donde explica su aparatosa segunda legislatura y su gestión de la crisis económica.
José Manuel García Margallo llegó a publicar su correspondencia con Planeta. Se tituló Todos los cielos conducen a España. Cartas desde un avión, un volumen que reúne las cartas y reflexiones políticas del entonces ministro de Relaciones. El espectro ideológico de los políticos travestidos en autores es amplio. Desde Esperanza Aguirre, que cuando abandonó la primerísima línea del PP publicó con Espasa -es decir Planeta- Yo no me callo hasta Manuela Carmena, que en la campaña electoral de 2015 reeditó Por qué las cosas pueden ser diferentes, un título que había publicado el año anterior y que podría considerarse el embrión de lo que fue su proyecto político con Ahora Madrid.
El Grupo Planeta intentó fichar a Pablo Iglesias para incorporarlo a su catálogo, en el que ya figuraban personajes como Juan Carlos Monedero con el libro Curso urgente de política para gente decente, que en un año sobrepasó la décima edición. Entonces Monedero aún formaba parte de Podemos, que se encontraba en fase de expansión y furor.