La serie Express nace con vocación de actualidad. Mujer protagonista, normalización sexual, crímenes rápidos y tecnológicos y banda sonora modernísima (con heróes del indie-pop actual como Rodrigo Cuevas y La Bien Querida en el primer capítulo). Maggie Civantos es Bárbara, una psicóloga de la policía que decide abandonar el cuerpo para formar parte de una unidad oculta, formada, entre otros por un exmilitar, una señora lista, un chaval friki-hacker y un violento hispano… que investiga y resuelve secuestros exprés en menos que canta un gallo urbano. La actriz revela a Vozpópuli los secretos de un papel ‘tan complejo que era imposible ignorarlo’.
Pregunta: Tras Las chicas del cable y Vis a vis: el Oasis, ambas de 2020 ¿En qué momento te llega la oportunidad de protagonizar la nueva serie de Starzplay?
Respuesta: Para mí, el año pasado supuso un ejercicio de reflexión y decidí que solo iba a aceptar proyectos que me interesasen, ya no iban a influir otros factores como que el público se olvidara de mí si no trabajaba todos los años. Había recibido un par de llamadas pero los proyectos no me encajaban hasta que el director de casting Luis San Narciso me presentó Express. Fue una señal.
P: Eres la protagonista, Bárbara, una psicóloga de la Policía que, al poco de ser presentada al telespectador, da un puñetazo a su jefe antes de entregar la placa.
R: Es mi secuencia favorita del primer capítulo. La serie me enganchó desde el principio, cuando leí los tres primeros episodios que tenía encima de la mesa. Volvía a trabajar con el showrunner Iván Escobar (Vis a Vis) y con la productora The Mediapro Studio y eso para mí es jugar en casa porque ya sabía que iba a ser un buen proyecto. Él siempre crea buenos personajes y combina géneros perfectamente. Todo fue muy bonito porque tuvimos un mes entero de ensayos, en enero del año pasado, con los directores Gabe Ibáñez e Iñaqui Peñafiel y con el resto del reparto y así aprendimos todos a conocernos y a entender a los personajes.
P: También repites con Vicente Romero, después de la serie Malaka, al que admiro desde Crematorio y que es uno de nuestros grandes actores de carácter.
R: Adoro a Vicente, siempre he sido muy fan suya y sabía que, si estaba él, todo saldría perfecto. También había trabajado con Ana Marzoa en la obra La gata sobre el tejado de zinc pero a Kiti Mánver, Loreto Mauleón, Omar Banata y Bernardo Flores no los conocía y por eso me sirvió tanto ese mes de preproducción con ensayos e improvisaciones con los dos directores. Creo que eso es lo que se debe hacer siempre para llegar al set relajados y con los cimientos de tu personaje bien construidos. Si algún día yo estaba cansada, enseguida notaba que ellos me arropaban. Luis San Narciso siempre une a gente con talento pero además procura que también sean buenas personas que saben trabajar en equipo. Una película son seis semanas de rodaje pero una temporada de una serie puede ser casi un año y es necesario llevarse bien, que el camino sea bonito.
P: Destaca en este primer capítulo tu momento Sherlock Holmes, adivinando la profesión y la vida privada del exmilitar interpretado por Vicente Romero.
R.: No soy especialmente fan de Sherlock o de la literatura o cine negro, solo me importan las historias y no los géneros, aunque reconozco que la acción se me da bien porque siempre he cuidado mi físico, desde muy pequeña. Conocía esos métodos de deducción y fue muy divertido adivinar que el personaje era exmilitar o que se había divorciado.
P.: También me gusta el compromiso feminista de esta ficción cuando tu hija, interpretada por Alba Planas, es acosada en su colegio.
R.: Aunque no existiera esa secuencia la serie es feminista porque no hace bandera de nada. Antes había mujeres en las series, pero no nos sentíamos representadas por ellas porque solían estar idealizadas. Ahora hay mujeres de verdad, no nos la que nos han dicho que tenemos que ser, sino las que somos. Bárbara es una mujer actual, que hace lo que puede con su vida y que es imperfecta. A veces incluso se ríe de sí misma, es muy humana. Quería crear una mujer empática, nada hermética. En este tipo de thrillers se retrata en ocasiones a mujeres hoscas y frías porque son inteligentes y no tiene que ser así. Se puede ser inteligente y también empática y emocional.
P: No obstante, el personaje hispano es el más violento del grupo, lo que no deja de ser un tópico.
R: Creo que se critica esa actitud hostil. El rol de Bernardo Flores es el malote y torturador del primer episodio pero nunca tuvo otras opciones en su vida. Luego tiene un recorrido más bonito cuando comprendemos sus motivaciones.
P: ¿Qué pides a este 2022 que ha empezado, como el año pasado, de forma más bien oscura?
R: En lo personal, salud, claro. En lo profesional, sobre todo que Express guste a mucha gente porque creo que merece mucho la pena. Además, acabo de terminar la película El juego [el debut en largo de Paco Sepúlveda] que también he coproducido, así que espero que nos la acepten en muchos festivales y que tenga mucho futuro.