Cogido desde hace días entre varios fuegos que se turnan en la rabia, Rubiales nunca fue un ejemplo. Tampoco su comportamiento en Sidney, él mismo lo ha reconocido ampliamente, fue ejemplar. Sin embargo, la jauría que pide ver rodar su cabeza es lo que da más miedo. No olvidemos que el miedo sigue siendo lo que lleva a mucha gente normal a participar, en plena democracia vegetariana, en auténticas carnicerías medievales. Entre muchos otras, recordemos la de Dolores Vázquez. Son dos personajes muy distintos una y otro, pero asediados por similar infamia, la misma horda de fondo.
¿Quién dijo que la democracia no necesita sacrificios humanos? Ninguna sociedad deja de ser represiva. Menos que ninguna, aquella que ha depositado el riesgo de vivir en consigna, en el trastorno bipolar del Estado-mercado. Con una mano mayoritaria nos maltrata y convierte en inválidos; con la otra, minoritaria, nos consiente una obscena libertad de expresión y nuevas formas de sangre. La misma sociedad que, dirigida por la furia puritana del norte, bombardea cada día lejanos países y revienta los cuerpos –mujeres y niños primero-, se escandaliza ahora por un "pico" robado. Si eso es violencia, ¿cómo le llamamos a la cotidiana caza del hombre que decretan los medios? Todo ello en una sociedad post-patriarcal en la que un feminismo vigilante avanza mientras los feminicidios crecen, aunque en estos días la barbarie real haya sido tapada por una ficción unánime de justicia vengadora.
¿Alguien duda que, si los sexos de este psicodrama nacional estuvieran invertidos y la presidenta de la Real Federación hubiera besado de igual modo a un jugador, el tema no habría suscitado ningún escándalo? Da vergüenza decir que ello se debe a una histeria justiciera basada en una imagen mariana de la mujer, supuestamente incapaz de ningún deseo turbio. Es humillante para el feminismo esta victimización purificadora, pero así están las cosas.
La actual orgía taurina española, sobre un hombre impulsivo que ha facilitado su acoso, no se explicaría además si esta sociedad no tuviera la necesidad ansiosa de buscar un suplemento de inocencia que alivie la frustración general. Encontrando un chivo expiatorio, la tribu exorciza el malestar que provoca una democrática mutilación diaria, esta servidumbre interactiva en la que todos hemos caído. De paso que se purifica, un país turístico que siempre está pendiente de cómo le miran los otros cree limpiar la imagen de la marca España a los ojos del mundo.
Rubiales como síntoma
El tradicional auto-odio hispano tiene esta capacidad fabulosa, que encanta a quienes en Occidente nos desprecian, de convertir una victoria en derrota clamorosa. España ya no es campeona mundial del fútbol femenino, sino del abuso masculino y los gestos groseros. Y además, igual que en la pandemia, durante días y días no habrá otro tema, pues el periodismo encuentra una amplia franja horaria servida de titulares baratos. Es tal la presión ambiental que la víctima oficial de esta telenovela puede cambiar de versión en tres días, mientras los anteriores amigos y empleados del monstruo se arrepienten en público de su tibieza inicial.
Muchos intelectuales progresistas se plegarán al conductismo vociferante, que brinda la posibilidad de poder odiar democráticamente
¿Se acabó la espontaneidad, la amistad y la seducción, la alegría de vivir sin consentimiento? Tal solución final a la incorrección es un triunfo inquisitorial, aunque dirigido por una elitista vigilancia horizontal nacida en el estreñimiento wasp. Muchos intelectuales progresistas se plegarán al conductismo vociferante, que al fin y al cabo nos brinda la posibilidad de poder odiar democráticamente. De manera que el haz –fascio- igualitario del rencor nos vuelve a unir, pero guiado esta vez por una multitud de víctimas puras. Sin necesidad de ningún Führer visible, un solo rebaño se vuelca en red contra una interminable hilera de enemigos de diseño. Después de muchos otros, le tocó el turno a Rubiales, que sin duda llevaba un tiempo de aspirante. Con su sacrificio, la sociedad de lisiados que somos se sentirá por un momento aliviada. Y Europa volverá a respirar tranquila al ver que esta nación vicaria vuelve a su sitio, arrepintiéndose de sus gestos eufóricos y castigando al culpable.
Petrarca
Recomiendo no acercarse a según que tipo de mujeres, pues pueden causarte la ruina. A partir de ahora todos a hilar muy fino y tener cierta perspicacia a la hora de elegir. Todo este sinsentido ha dado alas a lo que comúnmente se llaman feminazis, mujeres nauseabundas, ficticias, moradas o rosas que odian al ser humano diferente. Ahora nos toca a nosotros discriminarlas y que se queden en sus tribus y hagan sus mix, a ver cómo evolucionan.. Ah, nos quedaremos en la cueva, calentitos al calor de las llamas y que ellas vayan a cazar. Hipócritas de salón y banderita, de slogans y cerebros vacíos. Las mujeres de verdad seguirán siendo nuestro sueño. Porque es natural.
S.Johnson
Así es la cosa, aunque... ¿vivimos rodeados de im.béciles? probablemente no, lo que sucede es que los im.béciles son muy ruidosos y agresivos y el resto no tiene ganas de meterse en líos. Así triunfaron todos los fascismos.
Avefenix
Enhorabuena por su artículo, expresa la realidad que está sociedad ciega se niega a ver .Somos víctimas cómodas de nuestro asesinato, a todos nos llegará en algún momento,nadie se escapará pero mientras tanto vivimos en la inmoralidad de nuestra "felicidad".
Doctor Petiot
Cher M.Castro. Artículo extremadamente bien articulado con una prosa perfecta! Chapeau! Mientras Herr Karl con su particular vehemencia nos hace recordar cosas importantes. Todo está en manos de una juventud hedonista y de unos viejo(a)s pancistas que votaron al diablo creyendo que paga sus pensiones. La consigna es esconder, como las avestruces, la cabeza bajo el ala. Panem et circenses! Y que el último apague la luz. El sátrapa sabe que manteniendo al pueblo ahogado en miles de dificultades, apenas le quedan fuerzas para dirigir su atención a los graves problemas de su colectividad. Arrastrado como una vulgar polilla y girando sin cesar alrededor de la llama, acaba con las alas chamuscadas y devorada por ella.
Karl
No se obedece a la mayoría porque tenga razón, sino porque tiene la fuerza. __ "Pourquoi suit-on la pluralité? est-ce à cause qu'ils ont plus de raison? non, mais plus de force." ~Blaise Pascal, Pensees
Karl
El único propósito del Estado es proteger a los individuos, unos de otros, y al conjunto de enemigos externos. A algunos filosofastros de esta época les gustaría convertirlo en una institución para la moralidad, la educación y la edificación. Su propósito es abolir la libertad personal y el desarrollo individual del individuo para convertirlo en una mera rueda del Estado. Este es el camino por el que se ha llegado a las inquisiciones, los autos de fé y las guerras de religión. __ „Der alleinige Zweck des Staates ist, die Einzelnen vor einander und das Ganze vor äußeren Feinden zu schützen. Einige deutsche Philisophaster dieses feilen Zeitalters möchten ihn verdrehen zu einer Moralitäts-, Erziehungs- und Erbauungsanstalt: wobei im Hintergrunde der Jesuitische Zweck lauert, die persönliche Freiheit und individuelle Entwicklung des Einzelnen aufzuheben, um ihn um bloßen Rade einer Chinesischen Staats- und Religionsmaschine zu machen. Dies aber ist der Weg, auf welchem man weiland zu Inquisitionen, Autos de Fé und Religionskriegen gelangt ist.“ ~Arthur Schopenhauer
Karl
«El sujeto ideal de un régimen totalitario no es el fascista convencido o el comunista comprometido, son las personas para quienes la distinción entre los hechos y la ficción, y entre lo verdadero y lo falso han dejado de existir.» ~Hannah Arendt
Karl
“El fascismo no es lo opuesto a la democracia, sino su evolución en tiempos de crisis." ~Bertolt Brecht.
Karl
"Hay que pensar como la minoría y hablar como la mayoría." __ "Man muss wie die Minderheit denken und wie die Mehrheit sprechen." ~Arthur Schopenhauer
Karl
«Mientras no lo tomen en serio, [quien] dice la verdad puede vivir un tiempo en democracia. Después, la cicuta.» ~Nicolás Gómez Dávila.
Karl
La izquierda de hoy es carcunda. __ "La izquierda anhela un proceso liberador que ella misma convierte en dictadura." ~Homo Velamine