No dijo ni mu en la presentación de su nueva película en Nueva York hace dos días; y eso que estaba muy bien acompañado: desde Marc Jacobs hasta Kathleen Turner. Estaba afónico, explicó su “azafato” (en la ficción) Carlos Areces en el estreno de Los amantes pasajeros –traducida como I’m so exited- para disculpar el silencio del director Pedro Almodóvar, totalmente mudo a su paso por el Landmark Sunshine cinema el pasado martes.
Tras recuperar la voz ayer para decir, muy en serio, que España necesitaba un referéndum sobre la monarquía y que las declaraciones homófobas de la reina en el libro de Pilar Rubio le habían sentado muy mal, el director español tiene ahora un reto algo más complejo que sacudir a la corona: conquistar a los espectadores norteamericanos que dieron una tibia acogida a La piel que habito y acomodar los destrozos que causó la crítica de cine británica al juzgar su última comedia Los amantes pasajeros, a la que el diario The Independent calificó de “aburrida” y “con chistes que no hacían gracia”.
Y es que al Manchego le han dado puesto de honor esta semana en Los Ángeles: será justamente su última película la encargada de dar el pistoletazo de salida de su festival de Cine, que se inaugura hoy con la proyección de I’m so exited.
En esta ocasión, el Festival de Cine de Los Ángeles celebra una edición más que heterogénea –mejor dicho dispar-, a decir de la prensa estadounidense. En él coinciden Man of Steel, de Spike Jonze, por ejemplo con con el mismísimo Almodóvar.
Los amantes pasajeros, que por su juego de palabras ha tenido que ser rebautizada en los países de habla inglesa como I'm So Excited (en referencia a la canción de The Pointer Sisters que interpretan los azafatos en el filme), llegará sin embargo a las salas comerciales de Estados Unidos el 28 de junio.