El Ateneo de Madrid atraviesa una situación de crisis que obligará a un recorte de sus actividades, según anunció ayer su presidente, Carlos París, quien ha pedido ayuda para esta entidad cultural que está próxima a cumplir 180 años.
El presidente del Ateneo ha precisado que el centenar de actos que cada mes organiza la institución no se pueden mantener con las cuotas de los socios. La situación es "crítica", aclara aunque ha negado que haya riesgo de cierre, por lo que el plan de viabilidad pasa por recortar servicios y actividades.
La Junta Directiva del Ateneo se reunió ayer con el portavoz municipal del PSOE, Jaime Lissavetzky, quien se ha comprometido a reclamar el desbloqueo de partidas de ayuda a la institución que figuran en los presupuestos de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento de la capital y que no han sido hechas efectivas.
Tras la reunión, París y Lissavetzky han explicado a la prensa las ideas que se barajan para ayudar a esa entidad cultural. Una de ellas es que la Comunidad y el Ayuntamiento den la subvención prometida para este año, que asciende a 279.000 y 59.000 euros, respectivamente. Los socialistas pedirán que en el próximo pleno municipal se haga efectiva esa subvención, ha dicho el portavoz del grupo ante los periodistas.
Otras propuestas que se manejan es abrir la gran biblioteca del centro a quienes no son socios, incluir el Ateneo en las visitas guiadas que organiza el Ayuntamiento de la capital y que las actividades que programa sean declaradas de especial interés, lo que facilitaría aportaciones en régimen de mecenazgo.
Carlos París ha recordado que en este ejercicio ha desaparecido la subvención de las Cortes, que hace dos años fue de un millón de euros y que el año pasado se vio recortada a medio millón. En la actualidad, el Ateneo posee unos 2.500 socios, quienes pagan una matrícula de 110 euros y cuotas trimestrales de 54 euros. Sin embargo, el importe de esa recaudación no cubre el monto necesario para financiar la programación.