La exposición del artista Guillem Nadal (Sant Llorenç, Mallorca, 1957) en el Museo de la Ciudad de Valencia duró 24 horas. No más. Inaugurada el pasado jueves con el título D’aigua, terra i foc no no cumplió siquiera dos días en sala cuando los responsables de la muestra decidieron transformar el espacio en una pasarela. Sin hablar con el artista, parte de las pinturas y esculturas fueron retiradas para el evento. La obra restante sirvió de fondo decorativo para resaltar los trajes de las modelos.
Indignado por la decisión, Nadal decidió retirar sus obras porque, según manifestó a la prensa, “actuó con premeditación, mentiras y falta total de respeto”. Mientras estudia demandar al Ayuntamiento que preside Rita Barberá por los daños sufridos, Vicente Colom, responsable de la programación de la sala, se defiende argumentando que ambas actividades coincidían en la agenda.
Nadal, cuyo prestigio como artista le vale una apretada agenda de exposiciones en galerías europeas, no da crédito a a la actitud del Museo de la Ciudad de Valencia. "Han actuado con premeditación y en plan rastrero. Ningún responsable se ha puesto en contacto conmigo. La concejal, María Irene Beneyto, no ha respondido a mis llamadas. La persona que se ocupa de la sala y de su programación, Vicente Colom, solo me dice que me entienda con los servicios jurídicos del Ayuntamiento... Un disparate”.
