El director de escena Álex Rigola ofrece en la primera versión teatral de la ácida comedia de Woody Allen Maridos y mujeres una sesión de carácter terapéutico sobre las relaciones de pareja, al remover sensaciones con las que el público se sentirá "muy identificado". Interpretada por Luis Bermejo, Israel Elejalde, Nuria Mencia, Miranda Gas, Elisabet Gelabert y Alberto Jiménez, una de las películas más famosas del director y guionista estadounidense se subirá, por primera vez, al escenario del Teatro de la Abadía del 17 de enero al 24 de febrero.
La obra es "un retrato crudo y obsceno", a través del humor, de las relaciones de pareja, según Rigola, quien ha recordado que este es uno de los textos de Allen "más cercanos a la literatura que al mundo del cine" con "muchas posibilidades escénicas" por abordar este tema y "diseccionarlo" hasta sus últimas consecuencias. "No es una fiesta sexual, sino de relaciones de pareja", señala el director de la obra, quien pone de manifiesto que en numerosas películas se abordan las relaciones de pareja en su momento álgido pero en pocas se analiza "qué pasa cuando llevas más de diez años comiendo perdices" y viviendo con la misma pareja.
Maridos y mujeres es "un gran espejo de las relaciones humanas" en el que Woody Allen refleja lo que sucede a una pareja, Álex y Carlota, cuando se entera de que sus mejores amigos, Alicia y José Luis, supuestamente la pareja perfecta, decide separarse. La obra gira en torno a la catarsis que esa ruptura supone en la propia pareja de Álex y Carlota, quienes se empiezan a cuestionar su propia estabilidad, la complejidad de su relación, sus inseguridades e incluso sus cada vez más escasas relaciones sexuales.
"Sentimientos íntimos", como el engaño, el aburrimiento o la desidia se cuelan en la obra, según Rigola, quien recuerda que los protagonistas utilizarán al público como confidente de la historia que han vivido, "casi como psicoterapeutas" y asegura que para él el montaje ha sido "totalmente terapéutico". Como elemento escénico una sala de estar y un sofá, "el elemento de una casa por excelencia, y no la cama", asegura el director, con la intención de que los actores compartan asiento con algunos espectadores de primera fila para hacerlos partícipes de la función.
Para Luis Bermejo, que encarna a Álex, el marido de Carlota, este es un espectáculo "necesario" para todas las parejas, al ayudarlas a reflexionar sobre el momento actual de su relación. La inseguridad es otro de los temas que disecciona Allen en la obra, según Nuria Mencia, quien recuerda que muchas parejas basan su relación en la supuesta estabilidad de una pareja amiga y cuando esta fracasa su relación se desmorona.
Los personajes de la obra, que se estrena en el Teatro de la Abadía para iniciar después una gira por distintas provincias, son Álex (Luis Bermejo); Carlota (Nuria Mencia); José Luis (Israel Elejalde); Alicia (Elisabet Gelabert); Rain y Gloria (Miranda Gas); y Carlos y Ronald (Alberto Jiménez). Maridos y mujeres, dirigida por Woody Allen, fue estrenada en 1992 y recibió dos nominaciones al Oscar como Mejor Actriz de Reparto (Judy Davis) y Mejor Guión con una historia perturbadora sobre las siempre complicadas relaciones de pareja.
Justo después de la película, el director estadounidense se separó de su esposa, Mia Farrow, para irse a vivir con su hija adoptiva, Soon-Yi, un episodio que, según el director de escena, probablemente esté intrínsecamente reflejado en Maridos y mujeres.
