El tenista español Fernando Verdasco protagonizó este jueves la gran sorpresa del Mutua Madrid Open, cuarto Masters 1000 de la temporada que se está disputando en la Caja Mágica, al vencer en tercera ronda a Rafael Nadal (6-3, 3-6, 7-5) en un encuentro maratoniano que duró más de tres horas y que supuso el adiós al torneo del tenista balear, que no cuajó su partido y que no podrá llegar a la final, algo que había logrado en las últimas tres ediciones, según recoge Europa Press.
El inicio del encuentro parecía indicar un desarrollo del primer set que nada tuvo que ver posteriormente, y es que Nadal dispuso de hasta tres bolas de 'break' en el primer juego que bien podrían haber significado un respiro para el número dos del mundo. Sin embargo, Verdasco consiguió llevarse ese juego y aprovechar la dinámica ascendente para romper a continuación el saque de Rafa, que incomprensiblemente realizó una doble falta que otorgaba al madrileño la oportunidad de ponerse 3-0.
Con todo a favor, el décimo quinto cabeza de serie del torneo volvió a dar una de cal y otra de arena, por lo que cedió su saque a Nadal poniendo la normalidad en el resultado. Así marchaba el partido, con un Verdasco buscando el revés de su rival y apoyándose en su fuerte derecha, y con un Nadal que parecía estar afectado por el intenso calor que hacía sobre la pista central de la Caja Mágica.
Todo hasta el importante sexto juego, donde de nuevo Fernando Verdasco doblegó el saque de Nadal, poniéndose en clara ventaja para cerrar el set. El parón de cinco minutos sufrido en el séptimo juego por un golpe de calor a una aficionada pareció desconcentrar a Verdasco, sin embargo, pudo mantener su servicio y ganar el primer set por 6-3.
Intento de reacción del manacorí
Nadal necesitaba una reacción inmediata, ya que seguir por ese camino en el segundo set significaba despedirse del torneo. Sabedor de lo que se jugaba, el balear comenzó a estar más intenso, provocando menos errores no forzados, su talón de Aquiles en el primer set. Así llegó el 'break' de Nadal, en el cuarto juego que le ponía 3-1 y con su posterior servicio 4-1 y todo a favor. Sin embargo, no era la tarde de Rafa, que de nuevo volvió a cometer muchos errores forzando su rotura de saque en el séptimo juego, igualando de nuevo el set.
Si por algo es conocido Rafa Nadal es por dar siempre el máximo en los momentos más complicados y esta vez volvió a ocurrir. El de Manacor se volvió a sacar un 'break' sacando del partido a su rival hasta tal punto que adjudicó la bola de rotura con una doble falta. Nadal agradeció el error y aprovechó para cerrar con su saque el segundo set, mandando el partido a la definitiva tercera manga.
El factor psicológico fue clave en esta última manga y al comienzo Nadal se mostró mucho más fuerte que su rival. Pronto encarriló el balear el set, con un 'break' en el tercer juego que desquició a un Verdasco que se fue por momentos del partido, cometiendo numerosos errores no forzados. Una situación que poco a poco fue cambiando, ya que Nadal desaprovechó un 5-2 y permitió que su rival se creciera, remontando increíblemente el partido y consiguiendo cuatro juegos seguidos.
Con 6-5 a favor, el madrileño hizo saltar todas las apuestas al aprovechar su segunda bola de partido y así certificar la sorpresa, eliminando a Rafa Nadal, que había sido finalista en las últimas tres ediciones. Además, esta victoria supuso la primera de Verdasco en los 14 enfrentamientos que ha disputado ante Rafa Nadal y tendrá la oportunidad ante Tomas Berdych de meterse en semifinales del torneo madrileño.
Nadal muestra su enfado
El tenista confesó tras caer derrotado en tercera ronda que "o se cambian las circunstancias" respecto a la polémica pista azul o "se hará imposible" que vuelva al cuarto Masters 1000 de la temporada, ya que no puede arriesgarse a que le "pase algo" en el plano físico.
"Como profesional que soy y por la ilusión que tengo por jugar aquí siempre intento hacerlo lo mejor posible. No he sido bueno en adaptarme a las circunstancias que son muy distintas, que desestabiliza el juego. No pienso asumir riesgos, me voy con la cadera cansada de rectificar los movimientos y no estoy preparado para arriesgarme a que me pase algo. Hay dos opciones o se cambian las circunstancias o se hará imposible que venga, para mí no es una rabieta", reconoció en rueda de prensa.
Además, destacó las cualidades que salen perjudicadas por la pista azul. "La superficie iguala fuerzas porque en el tenis hay unas cuantas cosas que diferencian el nivel, los apoyos, el control, la movilidad y el cometer pocos errores. Aquí no favorece porque aquí no se coge el control con las piernas y en tierra gana el que es capaz de moverse mejor. Los partidos se igualan, cualquiera puede ganar y evidentemente ganará quien más se lo merezca", añadió.
Sin embargo, recalcó que Verdasco había "jugado mejor" que él, por lo que no había perdido "por la pista", ya que "es igual para todos". Además, argumentó que cuando pudo "cerrar el partido" no lo hizo, por lo que no estuvo "al nivel necesario como para estar en la siguiente ronda".
Por último, felicitó a Verdasco aunque mencionó que él se siente triste por la derrota. "He perdido contra Fernando después de 13 veces sin perder. Se lo merece porque ha jugado muy bien en los momentos importantes y le deseo lo mejor. Estoy feliz por él y evidentemente triste por mí", concluyó.