Buscar adelgazar a toda costa puede llevarnos a efectos muy perjudiciales para la salud. Como recuerdan los expertos, no existen las dietas milagro para adelgazar y siempre deberías contar con un nutricionista que te indique cuál es la mejor manera de alimentarte para llegar a tus objetivos. Por supuesto, la combinación de una alimentación equilibrada y baja en calorías debe ir acompañada de ejercicio físico, que combine siempre entrenamientos de fuerza con otros cardiovasculares.
La Organización Mundial de la Salud establece que en un individuo adulto sano debe consumir al día una cantidad mínima de 1.600 a 2.400 calorías al día. Las calorías son las que nos dan la energía que necesitamos para ‘funcionar’, ya sea para que nuestro corazón lata, para estudiar o trabajar o para hacer cualquier tarea diaria. Pensar que comer poco o saltarse comidas es bueno para adelgazar es un gran error.
Cuando te saltas una comida principal, se experimenta una caída en el nivel de azúcar en la sangre o glucosa, el principal azúcar que se encuentra en la sangre. Esto, entre otras cosas, puede provocar que te sientas cansado, mareado y hasta tembloroso y que tengas dificultad para concentrarte, ya que el cerebro no tiene el ‘combustible’ necesario para pensar de forma clara.
¿Perder peso o perder grasa?
Muchas veces no sabemos diferenciar lo que significa perder peso y perder grasa. No es lo mismo aunque en un primer momento te lo pudiera parecer. La diferencia principal entre la pérdida de peso y la pérdida de grasa radica en lo que se pierde realmente. La pérdida de peso se refiere a una disminución en el peso total del cuerpo, lo cual puede incluir pérdida de agua, masa muscular y/o grasa corporal. Esta pérdida de peso puede ser el resultado de una variedad de factores, como la reducción de la ingesta de calorías, el aumento de la actividad física, el cambio en los hábitos alimenticios, etc.
Por otro lado, la pérdida de grasa se centra específicamente en la disminución de la cantidad de grasa almacenada en el cuerpo. Esto generalmente se logra a través de un déficit calórico controlado y una combinación de ejercicio cardiovascular y entrenamiento de fuerza. La pérdida de grasa es importante porque el exceso de grasa corporal puede aumentar el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer.
En resumen, mientras que la pérdida de peso puede incluir la pérdida de agua y masa muscular además de la grasa, la pérdida de grasa se enfoca específicamente en reducir la cantidad de grasa corporal, lo que puede tener beneficios significativos para la salud a largo plazo. Es importante tener en cuenta que la pérdida de peso no siempre significa una mejora en la composición corporal, ya que es posible perder peso sin necesariamente perder una proporción significativa de grasa corporal. Ahí radica la confusión de pensar que comiendo poco y haciendo mucho ejercicio vamos a perder grasa. Eso no es siempre así.
¿Qué pasa si comes poco para adelgazar?
Cuando comes poco por una dieta para adelgazar muy estricta para adelgazar, te puede pasar que pierdas muchos kilos pero no grasa. Esos kilos serán principalmente de los depósitos acumulados de glucógeno, que va acompañado de litros de agua. Pero si mantienes esa dieta a lo largo del tiempo, los problemas a los que te puedes enfrentar pueden ser muchos más importantes, por lo que siempre deberías controlar tu alimentación con un nutricionista que te indique cómo perder grasa sin perjudicar a tu salud.
Si consumes muy pocas calorías de manera constante, tu cuerpo experimentará una serie de cambios y efectos negativos, ya que no estás proporcionando los nutrientes necesarios para mantener sus funciones vitales. Comer poco para tratar de adelgazar rápido puede tener efectos adversos significativos en la salud física y mental. Es importante asegurarse de obtener suficientes nutrientes para mantener el funcionamiento adecuado del organismo y evitar problemas de salud a largo plazo. Si estás considerando hacer cambios en tu dieta, es recomendable hacerlo de manera gradual y bajo la supervisión de un profesional de la salud. Entre los problemas a los que puedes enfrentarte se encuentran:
-Pérdida de masa muscular. Cuando consumes muy pocas calorías para tratar de adelgazar, tu cuerpo buscará obtener energía de otras fuentes además de la grasa almacenada, como los músculos. Esto puede provocar una pérdida de masa muscular, lo que puede disminuir tu metabolismo en reposo y hacer que sea más difícil perder peso a largo plazo.
-Desaceleración del metabolismo. Cuando consumes muy pocas calorías y comes poco en una dieta estricta para adelgazar, tu cuerpo puede entrar en un estado de "modo de hambre" donde trata de conservar energía y almacenar grasa para mantenerse vivo. Esto puede ralentizar tu metabolismo, lo que hace más difícil perder peso y puede llevar a un estancamiento en la pérdida de peso. Te hará además frustrarte al no ver resultados.
-Fatiga y debilidad. La falta de energía proveniente de los alimentos puede causar fatiga, debilidad y falta de concentración. Puedes sentirte cansado y con poca energía para realizar actividades diarias. Incluso puede afectar a tu estado de ánimo y sentirte apático y de peor humor.
-Riesgo de desnutrición. Al no consumir suficientes nutrientes, puedes correr el riesgo de desarrollar deficiencias nutricionales, lo que puede afectar negativamente la salud a largo plazo. Esto incluye deficiencias de vitaminas y minerales esenciales, que son necesarios para el funcionamiento adecuado del organismo.
-Problemas hormonales. La restricción calórica excesiva puede afectar las hormonas que regulan el hambre y la saciedad, como la leptina y la grelina, lo que puede hacer que sientas más hambre y dificultar el control del apetito, lo que puede llevar a un efecto rebote claro.
-Daño a órganos y sistemas corporales. La falta de nutrientes por comer demasiado poco en una dieta puede afectar negativamente el funcionamiento de órganos vitales como el corazón, el hígado y los riñones, y puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas a largo plazo.
vallecas
Olvídate de la palabra dieta, olvídate de la palabra "nutricionista". No te alarmes con este artículo. Efectivamente "si no comes te mueres". Empieza a hablar de Alimentación y forma de vida, Consejo para mayores de 50 años. . Comienza con un buen desayuno, lo que más te guste y en la cantidad que quieras, no te quedes con hambre, sáciate. Controla la comida y la cena. La cena poco y pronto. Camina 1 hora diaria. No bebas alcohol ni fumes. Ni comida basura. Haz esto el resto de tu vida. Si quieres adelgazar ponte el objetivo de 4 kilos al año, En 4 años 16 kilos. (por ejemplo) El éxito está asegurado.