Tal y como aseguran los expertos, la alimentación es uno de los factores clave para una vida saludable. Por ello, recomiendan incluir en la dieta diaria alimentos que aporten los nutrientes que el cuerpo necesita para estar sano y evitar enfermedades. Es el caso de la miel, un ingrediente admirado desde la antigüedad; los pistachos, uno de los frutos secos más saludables; o el jengibre, considerado un superalimento con importantes beneficios para la salud.
Originario del sudeste asiático, el jengibre es, desde hace más de 2.000 años, uno de los ingredientes más famosos de la medicina tradicional. Fueron los romanos los que trajeron este alimento a Europa, convirtiéndolo en uno de los imprescindibles de la cocina en muchos países, donde su consumo ha ido aumentando gracias a su característico sabor y sus numerosos beneficios para la salud. Entre ellos España, donde cada vez es más común el uso de esta raíz.
Aunque la manera más habitual de tomar el jengibre es en forma de infusiones, también podemos añadir este ingrediente a nuestros platos como condimento rallado o en polvo. Pero además, lo podemos encontrar en el mercado en otros formatos, como cápsulas. Diferentes formas de consumir este superalimento, convertido en un gran aliado de la salud.
Las enfermedades que el jengibre ayuda a combatir
Con un sabor picante y ligeramente cítrico, el jengibre cuenta con numerosos nutrientes. Es rico en minerales como calcio, sodio, potasio y fósforo, y vitamina C y del grupo B (B2, B3 y B6). Pero además, cuenta con gingerol, un aceite esencial que le aporta su característico toque picante y responsable de la mayoría de sus beneficios.
Con propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antioxidantes, el jengibre ayuda a combatir numerosas enfermedades como estas:
-Problemas digestivos e intestinales: el jengibre es conocido por favorecer las digestiones al estimular la secreción de enzimas digestivas y reducir la inflamación intestinal. Pero además, tiene un efecto gastroprotector que alivia malestares estomacales como la distensión abdominal y la flatulencia. Esta raíz también es utilizada para aliviar y combatir las náuseas.
-Gripes y resfriados: el consumo de este superalimento ayuda a reforzar el sistema inmunológico, por lo que ayuda a combatir y evitar enfermedades como la gripe y el resfriado.
-Infecciones e inflamaciones de garganta: además de ser muy admirado para combatir las anteriores enfermedades, el jengibre también alivia síntomas asociados como el dolor de garganta. Por eso, la infusión de esta raíz es muy utilizada para reducir el dolor y la tos y mejorar la congestión nasal.
-Hipercolesterolemia: aunque aún continúan los estudios al respecto, varias investigaciones aseguran que el jengibre puede ayudar a reducir significativamente los niveles de colesterol LDL y los triglicéridos en sangre.
-Enfermedades cardiovasculares: según la Fundación Española del Corazón (FEC), el jengibre es uno de los alimentos antioxidantes y antiinflamatorios más potentes. Gracias a estas propiedades, este ingrediente ayuda a reducir el riesgo de enfermedades del corazón al mejorar la circulación y reducir el colesterol. En los últimos años, diferentes investigaciones señalan que esta raíz puede contribuir a la prevención de enfermedades cardiovasculares.
-Niveles altos de azúcar en sangre: tal y como señalan diferentes estudios, el jengibre contribuye a que los niveles de azúcar en la sangre bajen, ya que aumenta los de insulina. Así, los expertos estudian la posibilidad de que este ingrediente ayude en casos de diabetes.
-Antiinflamatorias: una de las propiedades más admiradas del jengibre es la antiinflamatoria. Y es que, gracias al poder antiinflamatorio de los gingeroles presentes, puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo como la artritis reumatoide. De hecho, algunas investigaciones sugieren que podría ser una alternativa a los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos
