El deseo sexual puede verse afectado por múltiples razones. Desde el estrés, a cambios hormonales, el uso de algunos fármacos o unos niveles bajos de testosterona en sangre son algunos de los factores que pueden hacer que disminuya la libido y con ello las relaciones sexuales no sean tan plenas o satisfactorias como deberían.
La libido es el impulso o deseo sexual de una persona. Algunos expertos hablan de que el punto máximo de este deseo sexual se produce alrededor de los 20 años y luego va disminuyendo con el paso de los años. Pero en realidad, son muchos los factores que pueden influir y que muchas veces no tienen nada que ver con la edad.
El estrés o la ansiedad, un estilo de vida poco saludable, la falta de sueño o incluso una baja autoestima pueden ser algunas de las razones por las que en ocasiones nos apetece menos (o nada) tener relaciones sexuales con nuestra pareja. También los desequilibrios hormonales y aquellos provocados por enfermedades endocrinas, como la diabetes mellitus o problemas de tiroides, pueden llevar a una disminución del deseo sexual.
Etapas vitales como la menopausia en el caso de las mujeres, en la que hay una bajada de los niveles de estrógenos en el organismo, se puede dar también cierto dolor a la hora de mantener relaciones íntimas que llevan a la mujer a rechazar el sexo. Esto puede suceder también durante el embarazo y después del parto debido a los cambios hormonales.
Lo primero que deberíamos hacer cuando sentimos que las relaciones sexuales no son tan satisfactorias o no tenemos ganas de tenerlas, es ir al médico para que valore por qué nos está sucediendo eso y cuáles son las mejores soluciones para nosotros. Cada caso y cada persona es diferente. Quizá solo necesitemos darnos un tiempo para nosotros, tratar de llevar una vida más ordenada y una alimentación más saludable o quizá necesitemos algún tipo de terapia psicológica solos o con nuestra pareja.
Si hablamos de una relación de pareja, tener una buena comunicación con la otra persona y conocer de primera mano las necesidades en el sexo de nuestras parejas hace que la confianza mutua y personal lleve a tener unas relaciones más plenas.
Cuando necesitamos ayuda especial para intensificar el placer, la conexión mente, alma y cuerpo hace que redunde en todos los aspectos de la vida en pareja. Pensando en esto mismo, el afamado médico colombiano Cesar Velilla, mundialmente conocido como el doctor Lipo, fundador de la clínica Evolution MD en Miramar, Florida y experto en cirugía plástica y cosmética, ha optimizado dos de las técnicas más desconocidas y efectivas de células madre para aplicar en los órganos sexuales de hombres y mujeres.
“Para muchas personas el amor empieza con la parte física. La atracción sexual es más física que química. La sexualidad es parte fundamental en el éxito en una relación, pero es una realidad que a medida que pasan los años llegan las disfunciones en hombres y mujeres", nos explica el doctor.
"En los hombres la disminución de la fuerza de las erecciones, de la potencia de la erección, del tiempo de la erección. La edad tiene mucho que ver, pero también otras razones de peso como, por ejemplo, disminución en el flujo sanguíneo en pacientes con diabetes o los que tienen enfermedades vasculares, los que fuman… Es decir, los hombres con problemas con la circulación son más propensos a tener menos sangre que llegue a los cuerpos cavernosos del pene, ahí es donde se afecta la erección”, añade.
Tratamiento para mejorar el deseo sexual
“Existen tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos para esta situación. De los quirúrgicos está la llamada ‘bombita’, que es un implante que se pone en el pene y por intermedio de aire infla los cuerpos cavernosos del pene y al inflarlo hay erección. Ahora hay otras técnicas más modernas y no invasivas, y es con células madre de la propia sangre y es el plasma rico en plaquetas y lo que hace es estimular en el hombre la liberación de factores de crecimiento aumentando el flujo sanguíneo localizado", comenta el doctor Velilla.
En su clínica se lleva a cabo ese tratamiento y ha perfeccionado la técnica llamándola Dr. Lipo Intimate Shots. Esto consiste en una máquina especial no invasiva que a través de vibraciones. Se saca sangre del paciente, se procesa para sacar el plasma rico en plaquetas y esa misma sangre, con unas agujas muy pequeñas se inyecta para estimular el flujo sanguíneo, la potencia y la erección y por ende el desempeño sexual del hombre. Hay un mínimo de incomodidad, no tiene incapacidad, no es quirúrgico y los resultados son inmediatos.
Se trata de un procedimiento cien por cien natural porque se utilizan las propias células del paciente, ya que lo extractado de la sangre, genera el crecimiento del propio tejido y nutrientes dentro del pene mejorando. Hay muchos estudios médicos que dan fe de los estupendos resultados de esta técnica con bajo riesgo o resultados adversos. Los pacientes con disfunción eréctil de media a severa pueden ver mejoría (pacientes con cáncer de próstata por ejemplo). Este tratamiento no tiene los efectos secundarios que tienen las pastillas como Viagra y Cialis.
¿Y el deseo sexual femenino?
“Para la mujer tenemos el Dr. Lipo Intimate Shots, que consiste en el mismo proceso de tratamiento de la sangre de la paciente y les ayuda para mejorar sus orgasmos, ya que se inyecta alrededor del clítoris para sus orgasmos clitorianos”, nos cuenta Velilla. “La mujer tiene dos tipos de orgasmos: el clitoriano y el vaginal. Las inyecciones en esta área clitoriana son mínimamente dolorosas, pero los resultados dan muestra de un aumento de las sensaciones en la mujer”.
Para el orgasmo vaginal, “que es la estimulación del punto G, lo que hacemos es poner inyecciones de ácido hialurónico en el punto G y cuando el pene tenga contacto con la vagina lo va a estimular, ya que lo va a hacer más prominente de una manera más sencilla”, concluyó el especialista.
123probando
Nos han colado una pseudociencia (timo) en este artículo. ¿Cómo os prestáis a esto?