Todos quieren ser los primeros en conseguir el remedio que cambie el futuro de la humanidad. Pero sólo uno podrá lograrlo. Investigadores chinos, rusos, estadounidenses, españoles… Se estima que hay cerca de 130 proyectos en marcha que pretenden lograr una vacuna para el coronavirus. A la cabeza de esta carrera está la vacuna de la Universidad de Oxford. Un desarrollo que cuenta con respaldo de capital español.
La profesora Sarah Gilbert y sus cerca de 300 investigadores de Oxford han logrado en menos de cuatro meses unos avances que, en condiciones normales, se tardarían cerca de cinco años. Los primeros resultados registrados a finales del pasado mes de julio muestran segura y activa una respuesta inmune contra el coronavirus.
Este milagroso avance se ha conseguido por el buen hacer de los investigadores y la financiación privada que ha llegado a Oxford. Una de las empresas filantrópicas de este proceso ha sido Ferrovial. La empresa que preside Rafael del Pino ha respaldado a la institución británica con medio millón de euros para poder acelerar el desarrollo de esta vacuna.
Aunque no ha sido el único proyecto que ha respaldado Ferrovial. La empresa española también ha querido reforzar las investigaciones de vacunas locales. También ha destinado otros 250.000 euros para los dos proyectos de vacunas del Centro Nacional de Biotecnología que se está poniendo en marcha en Madrid y que se integran dentro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) del Gobierno de España.
Su tercer frente para respaldar la carrera de la vacuna son los 150.000 euros que han entrado a Baylor College of Medicine de Texas. Ferrovial respalda este centro de investigación, situado en una de las regiones donde más actividad tiene de Estados Unidos, que está buscando una vacuna para modificar las proteínas del virus. En total, la empresa que preside Del Pino ha dedicado cerca de un millón de euros a esta carrera frenética para encontrar un remedio frente al coronavirus.
Ayuda a ONGs
Pero, mientras se busca la vacuna, es necesario ayudar a aquellos ciudadanos que el coronavirus está dejando en situación de riesgo social. Y Ferrovial también ha donado 4,2 millones de euros a afrontar este otro castigo. Uno de los proyectos en los que se ha implicado es World Central Kitchen, la ONG del prestigioso cocinero José Andrés.
Esta asociación del asturiano, que ha logrado una fama reconocida en Estados Unidos, activó su primera cocina en Madrid para preparar comidas frescas a las familias necesitadas. Empleando a chefs locales que han tenido que cerrar sus restaurantes para dirigir las cocinas. El equipo se expandió rápidamente a Barcelona y Valencia, y ahora, opera en 10 ciudades de todo el país.
Este equipo ha servido 1,5 millones de comidas durante la pandemia. Bajo la etiqueta #ChefsForSpain, este programa distribuye comidas en más de 150 puntos de distribución además de miles de repartos puerta a puerta gracias a la colaboración con Correos, dotaciones locales de bomberos y empresas de reparto a domicilio como Glovo.
Junto a este proyecto que lidera José Andrés, la empresa que preside Rafael del Pino también ha respaldado la actividad de Cáritas, CESAL, The Trussell Trust Food Bank, en Reino Unido, Techo, en Chile; Acción contra el Hambre, en Colombia y Ayuda en Acción, en Perú, y Cruz Roja, en Portugal y Polonia, han sido algunas de las entidades beneficiarias.
