Los ciudadanos, y los miles de visitantes que hay esos días en la ciudad, se han quedado sorprendidos en las últimas semanas por la aparición de cientos de fotos de La Cibeles por Madrid, sin ningún tipo de texto, en los soportes publicitarios que la empresa JCDecaux tiene desparramados por la ciudad. En algunos de los carteles se han podido ver también imágenes del templo de Debod. Mucha gente llegó a pensar que se trataba de una campaña de publicidad subliminal de la alcaldesa Manuela Carmena mientras disfrutaba de sus vacaciones veraniegas. Nada más lejos de la realidad, según le han contado a este curioso Buscón.
JCDecaux, la empresa concesionaria de los soportes publicitarios, ha perdido el macroconcurso por la publicidad de Madrid. Le ha ganado un duro competidor como es Clear Channel. Y como el periodo para colocar anuncios había terminado, la empresa ha instalado hasta que retire los soportes estas fotos de Madrid para evitar que sus muebles publicitarios quedaran desnudos en plena calle. De ahí esa invasión de Cibeles que irá desapareciendo en las próximas semanas. Los muebles serán sustituidos por otros más modernos.
La empresa ganadora del concurso es Clear Chanel
La nueva empresa comenzará en las próximas semanas la colocación de los nuevos soportes después de ganar el concurso que le permitirá forrar Madrid de publicidad los próximos 12 años. Clear Chanel también ha ganado el concurso de Barcelona, pero en esta ocasión los gestores han sido más prudentes y lo han adjudicado para los próximos dos años. Estos concursos siempre han sido una gran pelea y en el que le permitió a JCDecaux entrar en Madrid intervino, hace muchos años, incluso el Gobierno francés.
Los famosos ‘chirimbolos’ franceses serán sustituidos paulatinamente por estos nuevos muebles urbanos que darán más información que los anteriores. Se colocarán 300 pantallas gigantes (publicidad e información) y 350 puntos de wifi, donde los turistas podrían descargarse también contenidos culturales en cuatro idiomas. En total se van a colocar 2.094 soportes frente a los 1992 que hay en la actualidad. Al igual que los actuales servirán para recoger vidrio, pilas y baterías móviles. Habrá 132 aseos públicos frente a los 27 actuales.
El Ayuntamiento ingresará un canon variable en función de la facturación y un fijo de 13,6 millones de euros, que elevará los ingresos por encima de los 400 millones de euros según señalan los expertos. Este concurso proviene de la época de Ana Botella y fue declarado desierto, pero una resolución del Tribunal Administrativo de la Contratación Pública de la Comunidad de Madrid anuló la resolución de dejar desierta la convocatoria.