El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, consideró este lunes que la presencia del tenista serbio Novak Djokovic en el Mutua Madrid Open “sería un gran reclamo”, pero explicó que “el acceso y condiciones de estancia dependen del Gobierno de España”. Así lo indicó en declaraciones a los medios de comunicación durante un acto en el distrito madrileño de Arganzuela tras ser preguntado por la posible presencia del deportista en el torneo que se disputará en la capital entre el 26 de abril y el 8 de mayo.
Djokovic es uno de los reclamos del torneo y su imagen aparece en la cartelería promocional del evento, pero los últimos acontecimientos, tras ser expulsado de Australia y no poder participar en el Open, dejan en el aire su participación en otras competiciones internacionales. Por ejemplo, hoy también se ha pronunciado el Gobierno francés, que solo permitirá la entrada a eventos deportivos a los profesionales, deportistas y público con la pauta completa de vacunación, según confirmó la ministra de Deportes, por lo que el tenista, que decidió no recibir el inmunizador, no podría participar en Roland Garros.
"Bueno para el torneo"
El regidor madrileño remarcó que tendrá que ser el Ejecutivo el que determine si cumple o no con las condiciones para entrar en el país, aunque actualmente, a pesar de no estar vacunado, sí podría entrar, ya que solo se exige una PCR negativa para acceder. Almeida reconoció que, “junto al resto de figuras, Djokovic es un reclamo, porque es el número 1 del mundo, por lo que si viniera y pudiera jugar sería bueno para el torneo”.
"Vencer al negacionismo"
No obstante, la postura del Gobierno español respecto al deportista parece haber quedado clara con las declaraciones este lunes de la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, que ha respaldado la decisión de las autoridades australianas y ha afirmado que "han hecho lo que debían, vencer al negacionismo". En una entrevista en La Sexta, la ministra ha contrapuesto los valores que imprime el tenista español Rafa Nadal a la postura del serbio que "no los tiene" y ha dicho que con su expulsión las administraciones han vencido al "negacionismo de las vacunas para poner en valor la solidaridad".
"El deporte también son valores", ha incidido toda vez que Djokovic ha aterrizado ya en Belgrado tras perder una batalla legal por no estar vacunado. No obstante, el Gobierno australiano ha dejado la puerta abierta para que el tenista pueda volver tras su deportación "si se dan las circunstancias adecuadas", sin tener que cumplir los tres años de prohibición para entrar en el país.