El estreno de Álvaro Arbeloa en la liga inglesa no fue el mejor posible. Su West Ham cayó estrepitosamente en casa por tres goles a cero frente al Southampton, equipo de media tabla. El conjunto de Arbeloa se sitúa en la antepenúltima posición, la cual te manda directamente a la Segunda División, con tan solo tres puntos en su casillero. Pese a tan dramática situación, eso no impidió que el exjugador del Real Madrid y el resto de su compañero se marchasen de fiesta la noche después del partido, según ha desvelado el diario británico The Sun en unas fotografías en las que se pueden contemplar a algunos jugadores de West Ham es muy malas condiciones.
Uno de los peor parados es el delantero Andy Carroll, famoso por los 40 millones que en su día pagó el Liverpool por él. Carroll no pasa por su mejor momento dentro del campo, donde de hecho apenas participa por su lesión de rodilla, pero fuera de él sigue en forma a tenor de las fotografías de The Sun en las que se le puede ver en bastante mal estado desayunando en un McDonalds a las 7 de la mañana junto a algunos compañeros como Aaron Creswell. La noticia ha levantado las iras de la afición "hammer", hartos de la situación y que no se tragan la "cena de unión de equipo" vendida por el club, y que poco tiene que ver con las declaraciones de algunos testigos que afirman que, incluso, llegó a correr el champán.
