Disturbios en el estadio del Espanyol. El FC Barcelona, tras golear al club perico en Cornellá (2-4), comenzó a celebrar el título de LaLiga formando un corro sobre el círculo central. Fue en ese momento cuando los ultras del Espanyol saltaron al terreno de juego al grito de 'A por ellos' para intentar agredir a los futbolistas. Esto obligó a los futbolistas azulgrana a refugiarse en los vestuarios. Fue necesaria la intervención de la Policía Nacional, que escoltó a los azulgrana y formó un cordón frente al túnel.
Los antidisturbios protegieron el túnel de vestuarios mientras los ultras del Espanyol trataban de alcanzar a los futbolistas del FC Barcelona. Mientras tanto, la megafonía comenzó a pedir a los aficionados que abandonaran el estadio, algo que no sucedió. Minutos después, la advertencia desde los altavoces del estadio fue mayor: "Si no abandonan el estadio, la Policía lo hará por la fuerza". Ahí, la mayoría del estadio, semivacío ya minutos antes del final del partido, obedecieron las órdenes.
La escena, más propia de un campo de fútbol de los años 80, ensombreció una celebración muy esperada por parte de los azulgrana, que tras 34 jornadas de Liga, consiguió cantar el alirón en su primera 'match ball'. Toca esperar al acta arbitral y a la actuación de LaLiga para conocer las primeras consecuencias de este episodio.
El primero en darse cuenta fue Xavi, que se encontraban viendo la celebración desde el banquillo. El entrenador dio el aviso a los jugadores para que corriesen al túnel de vestuarios para evitar un conflicto de mayor escala.
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Ya sabemos lo que harán los independentistas cuando llegue el momento de la verdad. Correr.