El Eibar recibe este sábado (18:00) al Sabadell, a quien intentará derrotar en Ipurua para mantener el liderato de la Liga Adelante y meter presión a sus dos principales rivales, Deportivo y Sporting, que esta jornada se enfrentan entre sí.
Sin embargo, y aunque resulte paradójico viendo su clasificación y sus cuentas, el Eibar parece condenado a luchar por la permanencia. Los armeros deben suscribir una ampliación de capital de 1.724.272,95 euros, una obligación legal, aunque a todas luces injusta, que impone el Consejo Superior de Deportes (CSD).
El presidente del Eibar, Alex Aranzabal, ha lanzado ya un mensaje de socorro: "Por un lado queremos transmitir nuestro optimismo, porque creemos que podemos sacar esto adelante y que podemos conseguir el objetivo. Pero también debemos tener claro que toda la masa social del Eibar tiene que ser capaz de aportar su granito de arena y arrimar el hombro".
El mandatario azulgrana asegura que "el futuro del club está en juego. Debemos mentalizarnos de que es un tema muy serio y el éxito dependerá de la implicación de la gente. Si se quedan en casa pensando que ya lo arreglaremos estaremos en riesgo. Si todos nos movilizamos, ganaremos la batalla, pero si se quedan en casa nos van a descender".
Aranzabal también avisa del peligro que supone la posibilidad de que el Eibar caiga en manos de grupos inversores. "Para nosotros no sería la solución en ningún caso. La filosofía del club es que el Eibar sea de una propiedad repartida, popular, y que siga teniendo muchos dueños. El riesgo de que caiga en manos de algún grupo inversor existe, porque es un club saneado, en buena situación económica y para alguien que quiera invertir, es un atractivo".
Tanto el PSE como el PNV y la Diputación de Gipuzkoa han presentado diversas iniciativas para reclamar una solución justa para la entidad azulgrana. El exalcalde de San Sebastián, Odón Elorza, ha presentado una proposición no de ley en la Cámara Baja solicitando que el CSD exima al Eibar de la obligatoriedad de ampliar su capital, o al menos flexibilice la cantidad, resaltando la impecable gestión económica realizada.
Elorza ha explicado que "el Eibar cuenta con un capital social de 422.253 euros, y se le exigen 2.146.525,95 de euros, y es uno de los pocos clubes de la Primera y Segunda de la Liga de Fútbol Profesional que, con sus arcas perfectamente saneadas, no tiene contraída deuda alguna".
Para el diputado socialista, "resulta paradójico que este club, habiendo sido puesto como ejemplo de buena gestión por la LFP, a pesar de su modestia y sus limitaciones económicas, deba hacer frente a una ampliación de capital de semejante magnitud mientras la deuda acumulada con Hacienda por los equipos que no han cumplido con sus obligaciones tributarias asciende a 752 millones de euros".
