”Los resultados que hemos logrado no han sido los mejores, pero sólo son los entrenamientos libres, aún queda mucho gran premio", comentó Sebastian Vettel tras la sesión del jueves. “Las primeras vueltas con los neumáticos superblandos no fueron bien, así que ahora hay que averiguar el porqué. No pude progresar ni mejorar mis resultados, lo que, en un principio, debería haber sido sencillo”, prosiguió el piloto alemán.
La obsesión de Vettel con las ruedas de su Red Bull comienza a cansar en el paddock. Fundamentalmente, porque las gomas que proporciona Pirelli son las mismas para todos y es trabajo de los constructores en pretemporada adaptar lo mejor posible los coches a esos neumáticos.
Force India es último equipo que ha expresado su oposición a cualquier cambio en el compuesto de los neumáticos, algo anunciado por Pirelli a partir del GP de Canadá (9 de junio) y prohibido posteriormenete por la Federación Española de Automovilismo (FIA).
Conocida la postura de la FIA, Vettel ha seguido quejándose con el pretendido argumento de que la alata degradación de las gomas provoca inseguridad peligrosa. Y Pirelli ha tenido que salir al paso y negar que exista ningún problema de seguridad.
"Es importante señalar que las exfoliaciones de goma que ocurren cuando la banda de rodadura se desprende, fundamentalmente en las ruedas traseras, no pone en peligro la seguridad de los neumáticos", asegura Paul Hembrey, director de Pirello.
"Estamos tratando de buscar una solución que sea compatible y justo para todos los equipos", declaró Hembrey a Autosport. Y desveló que estudian cambios, pero solo en las gomas traseras. Otro palo para Red Bull pues esta medida podría ayudar a equipos como Mercedes, que ha luchado contra el sobrecalentamiento de sus neumáticos traseros durante toda la temporada.
El cambio no sería suficiente, sin embargo, para Red Bull, que ha tenido que lidair con un rendimiento limitado y problemático... en las ruedas delanteras. ¿Cuántas veces más se quejará Vettel?