El próximo jueves se escenificará el partido de vuelta entre el Feyenoord y la Roma en Rottedarm. Será el segundo episodio de una eliminatoria marcada por la brutalidad de los ultras holandeses, que en su visita a Roma, tomaron la Plaza de España y destrozaron la fuente de la misma. Para este partido de vuelta, se espera la visita de 2.400 seguidores de la Roma y se teme que quieran cobrarse una vendetta por los hechos ocurridos en la capital italiana una semana antes.
El Ministerio del Interior está trabajando con la policía holandesa para evitar disturbios. Se ha decretado la alerta máxima por temor a un enfrentamientos entre los radicales de ambos equipos. "Vamos a evaluar cualquier problema para el viaje en el próximo Comité de orden y seguridad, entonces vamos a decidir", dijo el superintendente de Roma, Nicholas D'Angelo, a raíz de la devastación en la ciudad. De los 2.400 aficionados de la Roma que estarán en De Kuip, el estadio del Feyenoord, la prioridad es evitar que los '50 Romanisti' detenido por la policía se cobren venganza asaltando Rotterdam.
Según los informes, los hinchas romanos llegarán a Rotterdam en avión, tren y autobús. El club giallorossi recomienda que "sus fans que se abstengan de comprar entradas en circuitos o canales fuera de las vías oficiales" y advierte que "a sus fans que no viajen a Rotterdam sin entradas para ingresar del estadio De Kuip". La situación, según fuentes del Ministerio del Interior, se define como "muy delicada". Se ha producido intercambio de información con la policía holandesa, que dirigirá junto al Ministerio del Interior el despliegue por el nivel de riesgo del Feyenoord-Roma, así como el posible envío de apoyo de la policía italiana.
Las autoridades holandesas, por su parte, han informado que el 26 de febrero habrá sólo un tren directo desde la Estación Central hasta el Estadio De Kuip. El tren especial para aficionados de la Roma partirá desde la estación a las 17:15 y llegará al estadio del Feyenoord a las 18:45 horas. También se creará una Fan Zone en el viejo puerto de Rotterdam, cerca del distrito de Blaak, de la que los autobuses partirán a las 18:15 horas. La venta de alcohol está prohibida y los que traigan bebidas alcohólicas de fuera se arriesgan a una multa o incluso a ser arrestados.