El Real Madrid ya se encuentra de gira de pretemporada por Canadá. Zinedine Zidane encabeza una expedición en la que aún faltan muchos jugadores por incorporarse. Jugadores como Pepe y Bale se unirán al equipo cuando vuelvan de la gira, Morata, Sergio Ramos y Lucas Vázquez, junto a James y Modric viajarán a Estados Unidos. Y Cristiano Ronaldo se encuentra recuperándose de la lesión que se produjo en la final de la Eurocopa tras la entrada del francés Dimitri Payet.
Sin embargo, antes de subirse al avión, Zidane, que había demostrado hasta hoy ser un técnico de carácter, ha tenido un encontronazo con Florentino Pérez, quien en calidad de director deportivo, ha impuesto su criterio en decisiones deportivas que afectan al entrenador. Para empezar, Pérez ha desestimado el fichaje de N'Golo Kanté, el refuerzo defensivo para el mediocampo que había solicitado Zidane. El francés ha sido traspasado por 35 millones al Chelsea ante la pasividad de Pérez.
El presidente y director deportivo prefiere hacer negocios con su amigo y agente Jorge Mendes, y por eso se guarda en la recámara la baja del fichaje del valencianista André Gomes, un futbolista que no está entre las preferencias de Zidane. Además, la operación por el medio portugués será más costosa, lo que eleva los emulomentos de Mendes, que se embolsará el 10% de la operación, con la connivencia de Florentino.
El presidente ha desestimado el fichaje de N'Golo Kanté. Prefiere cerrar la contratación de André Gomes con Jorge Mendes, aunque sea más cara y no sea el elegido por Zidane
Otro de los puntos que ha generado un enfrentamiento entre ambos es el caso de James. Florentino Pérez ha dejado claro que el jugador no será traspasado bajo ningún concepto, porque más allá de lo futbolístico, es un jugador que abre muchas puertas al club, y al propio presidente, en Sudamérica. Zidane no ha visto implicación en el jugador y no se compromete a darle minutos porque ya ha demostrado que su compromiso y su ética de trabajo no es precisamente ejemplar. Pero el jugador reúne 'otras' cualidades muy apreciadas por el presidente, que desembolsó en su día 84 millones de euros por su fichaje.
El tercer punto de fricción tiene que ver con Álvaro Morata. Zidane está encantado con el regreso del internacional español, que ha advertido que no vuelve para convertirse en un recurso de banquillo y que quiere pelear el puesto a Cristiano, Benzema y Bale. El agente del jugador, Juanma López, ya se ha reunido con el club para conocer la disposición del Real Madrid y para advertir que si el futbolista se queda, sus exigencias económicas distan mucho de lo que cobra actualmente. Morata ha alcanzado un status ecónomico y deportivo tras su paso por la Juventus, que le situaría por debajo de Cristiano y Bale, y cerca del generosamente renovado Sergio Ramos.
Pero Florentino, que no tiene ninguna intención de acometer esa mejora salarial del canterano, sigue viendo al 9 como una fuente de ingresos. Para Pérez, Jesé es un recambio de garantías para la BBC, además Morata se convertiría una amenaza para la recuperación de minutos de James. El Real Madrid ha desechado ofertas por 60 millones por el delantero porque espera ingresar un mínimo de 70 kilos. En las últimas horas se habla de una oferta mareante de la Juventus por Higuaín que alcanzaría los 95 millones, dinero con el cual los napolitanos podrían acometer el fichaje de Álvaro.
Y la última discusión entre ambos se ha producido a raiz de la imposición de Florentino de subir al avión al noruego Martin Odegaard, quien ya fue alineado con el primer equipo por Ancelotti obligado por Pérez, como admitió el técnico. "Florentino tenía especial interés en que el chico noruego jugase algunos partidos. Fue un fichaje del club", advirtió Carletto. Zidane que prefería no contar con el noruego, pero la injerencia del presidente ha subido a Odegaard al avión. El Real Madrid busca en estos días en club alemán para mandarle cedido la próxima temporada.
Todo esto ocurre al tiempo que France Football adelanta, que el club blanco ha fichado al central noruego Ulrik Jenssen, que cumplió ayer 21 años, y juegan actualmente en el Olympique de Lyon. Otro 'fichaje' de Florentino, como el de Odegaard, con el que tendrá que convivir el inquilino del banquillo madridista.
Zidane se ha subido al avión tras tragarse todos estos sapos asumiendo su irrelevante peso en las decisiones deportivas de un club que sigue gobernado por el capricho de un Florentino, que tiene en Jorge Mendes a su agente de cabecera, y en Peter Lim a un enigmático colaborador. Y ahí Zidane no tiene nada que decir.