El piloto australiano Daniel Ricciardo (Red Bull) ganó el Gran Premio de Bélgica, la tercera victoria de su carrera, al completar las 44 vueltas al circuito de Spa-Francorchamps en 1h.24:36.556 con el alemán Nico Rosberg (Mercedes) segundo y el español Fernando Alonso (Ferrari) octavo.
Tras Ricciardo y Rosberg, el finlandés Valtteri Bottas (Williams) completó el podio, por delante de su compatriota Kimi Raikkonen (Ferrari), que fue cuarto; y el alemán Sebastian Vettel (Red Bull), quinto.
Alonso: "Si hubiese arrancado el coche podríamos haber hecho podio con bastante facilidad"
Completaron la zona de puntos el danés Kevin Magnussen (McLaren), sexto; el británico Jenson Button (McLaren), séptimo; Alonso, que fue octavo; el mexicano Sergio Pérez (Force India), noveno; y el ruso Daniil Kvyat (Toro Rosso), que concluyó en séptimo lugar.
El arranque de carrera fue frenético, incluso en la vuelta de instalación, en la que el Ferrari de Fernando Alonso no arrancó, lo cual le provocó una sanción de cinco segundos porque sus mecánicos tuvieron que quedarse en la pista por encima del tiempo permitido.
El F14T del español no arrancó, tuvo problemas de Kers y 180CV menos de potencia durante la carrera
Tras la salida, en la que el británico Lewis Hamilton (Mercedes) se colocó en primer lugar, un toque entre el alerón delantero de Rosberg y la rueda delantera izquierda de Hamilton provocó un pinchazo del inglés, que le descartó de la lucha por la victoria y le relegó a los últimos puestos, aunque finalmente se retiró cuatro vueltas antes del final por problemas de calentamiento del motor.
Ricciardo se hizo con el liderazgo gracias a una acertada estrategia de paradas frente al líder del Mundial Nico Rosberg, que intentó en las últimas nueve vueltas lanzarse a la búsqueda del australiano con un cambio extra de neumáticos, pese a lo cual se quedó a unos tres segundos del australiano en el final.
Valtteri Bottas se ganó el tercer lugar del podio en una gran lucha con su compatriota Kimi Raikkonen, que retuvo el tercer puesto hasta las últimas vueltas, cuando fue adelantado por el Williams y se tuvo que conformar con el cuarto lugar, primera vez en esta temporada que termina por delante de su compañero Alonso.
El asturiano describió el desastre de carrera sufrido en Spa en forma de problemas varios: "Hemos tenido varios; el KERS no funcionaba en las vueltas cuando salíamos de boxes, íbamos sólo con el motor normal, por tanto son ya 160 caballos menos de por sí. Durante todo el fin de semana hemos tenido también algún problema con el flujo de gasolina, que tenemos 20 caballos menos. Por tanto, la carrera ha sido un poco dura pero es lo que hay".
"Desde la salida el coche no se ponía en marcha, tuvieron que poner una batería extra para arrancarlo, el coche estaba como sin corriente. Hoy no ha salido nada a derechas -añadió-. Luego cuando te ponen una penalización ya te quedas en grupos retrasados, sabiamos desde ayer que la velocidad iba a ser nuestro punto débil y por mucho que lo intentásemos no podíamos pasar a nadie".