Un anuncio protagonizado por la actriz Scarlett Johansson para Sodastream ha sido vetado para aparecer en televisión durante la Super Bowl que se celebra este domingo. En este caso, el problema no es el contenido sensual, sino de incompatibilidades comerciales.
Sodastream presenta un aparato que hace que puedas crearte tu propio refresco gaseoso gracias a unas cápsulas y al final del anuncio Scarlett dice “perdón Coca y Pepsi”. La FOX, cadena que tiene en exclusiva la transmisión de la final de la Super Bowl, considera que vulnera los intereses de Coca-Cola y Pepsi-Cola, dos de los mayores anunciantes del evento y porque, además, la segunda marca es patrocinadora de la NFL.
Cabe recordar que Sodastream es una empresa de origen israelí que ya ha sufrido varios ataques mediáticos. La propia Scarlett ha sido acusada por grupos palestinos de apoyar actor ilegales, pues la compañía produce su refresco en Ma’ake Adumim, un asentamiento israelí en la franja de Cisjordania.
