El piloto finlandés Kimi Raikkonen (Ferrari) ha sido el más rápido este jueves en la última sesión de entrenamientos oficiales de Fórmula 1 de esta semana en el Circuito de Barcelona-Cataluña, con un 1:20.872, y la espera de lo que suceda la próxima semana parece claro que la escudería italiana es la única que sigue a Mercedes, más discreta tras un matutino fallo eléctrico en una jornada de 'lluvia' muy soleada.

La prueba de los neumáticos de lluvia que Pirelli quería brindar a las escuderías se truncó por la mañana pese a los esfuerzos de los responsables del circuito por tener el asfalto mojado. Las cubas de agua hicieron su trabajo pero el sol, el aumento de la temperatura y la falta de humedad fueron en contra de un invento que se repitió, tampoco sin demasiado éxito, por la tarde.

De todos modos, aunque menos que en las tres jornadas previas, la mayoría de escuderías pudieron hacer esas pruebas en mojado y también en seco, pues al final se dieron ambas situaciones en el trazado catalán. Los tiempos no fueron los más rápidos, pero aún Raikkonen logró en las 84 vueltas que dio con su Ferrari un 1:20.872 con el que sacó casi un segundo a sus inmediatos perseguidores; Max Verstappen (Red Bull) y Jolyon Palmer (Renault).

Un buen fin a una semana para los del 'cavallino rampante', que han sido grandes protagonistas junto a Mercedes. La escudería alemana sigue al frente con un monoplaza igual de rápido y fiable que el que los ha hecho campeones de los últimos tres Mundiales, aunque Lewis Hamilton se quedó sin rodar por un fallo eléctrico.

Sí lo hizo su nuevo compañero Valtteri Bottas, quien salió en los últimos minutos de la sesión matinal para dar vueltas de instalación y por la tarde dejó el número de giro en 68. Mucha información recabada en base a varias tandas o 'stints', en mojado y en seco, si bien no bajó del 1:23.443 que le valió para ser octavo. Un mal tiempo pero enmarcado en la búsqueda del simulacro de carrera, pues el objetivo no pareció ser el de estar arriba en la tabla.

Problemas para Sainz

Por otro lado, la escudería Williams confirmó de buena mañana que no rodaría este jueves, ni en la sesión vespertina, debido a los daños en el chasis del FW40 provocados por el incidente del piloto canadiense Lance Stroll este miércoles, si bien han detallado que tendrán preparado un nuevo chasis para la próxima semana, con cuatro últimas jornadas de 'test'.

Como sucedió con el Williams, tampoco se vio a ninguno de los Toro Rosso. Tan solo el ruso Daniil Kvyat hizo una vuelta de instalación sin registrar tiempo a primera hora de la mañana. Pese a que la escudería informó de que el español Carlos Sainz y Kvyat se repartirían la sesión vespertina, no rodaron ni uno ni otro con un posible problema grave en el motor.

Sí fue más productiva la jornada para el debutante Antonio Giovinazzi, quien sumó 84 vueltas con su Sauber y firmando el quinto mejor registro, a 1.5 segundos de Raikkonen. El italiano cuajó su mejor actuación de la semana en Montmeló, igual que Palmer (Renault), tercero, y un Romain Grosjean que situó al Haas cuarto y con 116 giros realizados, el líder en este sentido de la jornada.

También respiraron algo más tranquilos en McLaren Honda. El volante fue este jueves para el belga Stoffel Vandoorne, quien marcó el mejor tiemplo de la escudería en los cuatro días de test con un 1:22.576, llevando a cabo además 67 vueltas y sin tener los problemas graves que él mismo o que su compañero Fernando Alonso sí tuvieron, sobre todo, en los dos primeros días.