"Siempre que juego contra Pep me quedo con un jugador menos: debe ser una premisa de la UEFA", afirmó Mourinho en los micrófonos de Mediaset Italia. "Esta es mi historia con la UEFA desde hace mucho, mucho tiempo. Cuando fui técnico del Chelsea me quedé con diez dos o tres veces al medirme contra el Barça. Sacad vuestras conclusiones", añadió el entrenador del conjunto inglés.
"Estoy muy decepcionado. En mi opinión, el mejor equipo perdió", dijo Mourinho después de arremeter contra el árbitro sueco, Jonas Eriksson. "Sí, fue una segunda tarjeta, pero no se hace nunca de esa manera. Habría que apercibirlo, usando el inglés de caballeros. No es nuevo para mí. Los que sentimos, los que vivimos en el fútbol, tenemos una regla muy importante: la pasión. Si estás enamorado, no matas una final con una segunda tarjeta", explicó portugués sobre la durísima entrada de Ramires sobre Goetze que le costó la segunda amarilla, pero que debió ser roja directa.
Mou recordó su "experiencia fantástica jugando con diez en partidos de UEFA" e ironizó sobre la posibilidad de "entrenarlos así, para marcar gol", tras explicar que los suyos habían dado todo de sí y acabaron extenuados. Para acabar con el árbitro, el luso señaló que "hubo muchas tarjetas, estaba encantado de añadir minutos, por lo que nunca vi que el partido se acabara, y el gol de Javi Martínez fue inmerecido".
Por su parte, Pep Guardiola dedicó su primer título como técnico del Bayern a su predecesor en el banquillo, Jupp Heynckes. "Gracias a los jugadores por ofrecerme esta final, que está dedicada a Jupp Heynckes. Está dedicada a él. Fue una experiencia increíble", dijo el español tras el partido.
"El Bayern ahora tiene todos los títulos del mundo, y estamos muy orgullosos", declaró el de Santpedor, que no quiso hablar de los árbitros ni contestar a las declaraciones del técnico portugués. "Vencer al Chelsea y a Mourinho es muy difícil, y por eso estoy muy feliz".
