De repente, todo el mundo sabe de baloncesto. Y casi todos señalan a Juan Antonio Orenga, seleccionador, como culpable de la derrota ante Francia en la semifinal del Eurobasket.
Las redes sociales, sobre todo Facebook y Twitter, ardieron durante más de diez horas calcinando la reputación de Orenga como entrenador. Su apellido fue tendencia (TT) desde que en la noche del viernes acabó el partido ante los galos y hasta pasadas las 11 de la mañana del sábado.
Desde personajes populares como Pedro J. Ramírez, director de El Mundo, que lleva días abofeteando a Mariano Rajoy en la cara de Orenga -"ya os dije que el tono apático y la falta de tensión de Orenga me recordaba a cierto político español. Hemos perdido con un equipo peor"- hasta aficionados anónimos, la inmensa mayoría condena al técnico castellonense.
Con mayor o menos agresividad y educación, los internautas acusan al seleccionador de poca experiencia, escasa preparación y, sobre todo, falta de reflejos para tomar decisiones en los momentos peliagudos de los partidos.
Orenga fue nombrado seleccionador a finales del pasado mes de noviembre, no se sabe hasta cuando. O, en palabras de José Luis Sáez, presidente de la Federación Española de Baloncesto: “Tiene contrato indefinido. Será seleccionador hasta que se tome otra decisión”. ¿Cuánto tardará Sáez en tomarla?
