La esquiadora rusa de 'freestyle' Maria Komissarova ha revelado que se ha quedado parapléjica de ombligo hacia abajo como consecuencia de las lesiones sufridas en su espalda después de del accidente que tuvo en Sochi, en los entrenamientos previos a su participación en los Juegos Olímpicos celebrados en la ciudad rusa.
Komissarova, de 23 años, explicó su lesión y quiso agradecer las muestras de cariño recibidas. "Gracias. No sé por dónde empezar, pero no quiero encerrarme en mí misma porque todo el mundo me ha apoyado mucho", reveló en su página de Instagram. "Han pasado 10 días desde mi intervención en la columna. No siento el cuerpo por debajo del ombligo, pero soy fuerte y sé que me recuperaré", amplió.
Tras su accidente, la deportista rusa fue sometida a dos operaciones para intentar corregir la fractura y la dislocación de la columna vertebral. Posteriormente se ha estado rehabilitando en una clínica alemana. Antes de salir de Rusia fue visitada por el presidente del país, Vladimir Putin.
La Federación rusa de freestyle ha abierto una cuenta bancaria para recaudar fondos para el tratamiento y convalecencia de la esquiadora rusa. Según un comunicado, "la rehabilitación podría ser un proceso largo y complicado, y puede ser necesario tener apoyo financiero adicional". Hasta el momento, los gastos han corrido por cuenta del gobierno ruso y la propia Federación. Las donaciones para continuar el tratamiento serán recogidas por la red de solidaridad Ostrova, con sede en San Petersburgo, aunque es triste que después de todo el dinero que se ha gastado Rusia en organizar los Juegos de Sochi, ahora se tenga que recurrir a donaciones públicas para ayudar a la esquiadora que ha quedado parapléjica.