El virus Zika comienza a preocupar seriamente a los deportistas españoles. El último que ha levantado la voz en este sentido ha sido Pau Gasol, que durante un acto promocional en Madrid ha encendido todas las alarmas al declarar: "Estoy valorando no ir a Rio de Janeiro por el zika. Lo importante es que se anteponga la salud de los deportistas y aficionados que vayan a Río. Dispongo de información privilegiada y la estoy compartiendo con compañeros de la Selección y otros deportistas españoles. La situación es grave. De momento, hay un debate abierto y de ahí vienen las dudas. Espero que los Comités Olímpicos Nacionales y las Organizaciones de Salud informen sobre los riesgos que hay en Brasil", comentó Gasol".
El jugador de Chicago Bulls no es el primero que se pronuncia en este sentido. hay diversas federaciones y deportistas que han advertido que si no hay una misma seguridad para evitar el contagio, no acudirán a los JJOO. Mireia Belmonte ya avisó en su día sobre el virus Zika: "Tenemos que estar seguros de que vamos a Río sin riesgo". Desde el pasado mes de abril, el Zika se expande de manera explosiva por los países de Suramérica. La Organización Mundial de Salud (OMS) estima que el brote podría causar entre “tres y cuatro millones” de enfermos en el continente americano.
Las federaciones olímpicas del mundo estñan solicitando información al respecto y los organizadores de los Juegos responden con el único argumento firme que tienen a mano. Así, minimizan los riesgos del Zika recordando que agosto, cuando se celebrarán las pruebas, es el mes más frío y seco del año -invierno en Río de Janeiro-, lo cual dificulta la reproducción de los mosquitos. Lo que se les olvida es que "más frío" en Brasil significa 24 grados centígrados de media.