El presidente del Barcelona, Sandro Rosell, es portada del dominical del diario ARA. En la entrevista deja un titular que seguramente va a levantar polvareda: "Todos sabemos que la última Liga fue muy extraña", en referencia al título ganado por el Real Madrid.
Rosell también habla del cambio en el banquillo del Camp Nou, con la salida de Pep Guardiola y el 'ascenso' al cargo de su segundo, Tito Vilanova: "Chapeau por Tito. Lo veo animado, de salud está perfecto, desde octubre no teníamos ninguna duda de que él sería el entrenador si Pep decidía no continuar".
En cuanto a Guardiola, con el que ha mantenido una tensa relación, el presidente del Barça recuerda que le conoce desde que era jugador del club: "Mi vida siempre había sido contratar a figuras del deporte, clubs o acontecimientos. Uno de los primeros fue Pep Guardiola: cuando tenía 23 años, le hice el contrato de botas con la marca Nike". Además, recuerda la llegada de Ronaldinho, que él facilitó cuando estaba en la junta de Laporta, como el gran punto de inflexión para el barcelonismo: "Ese fichaje hizo que la dinámica negativa que se había instaurado en el Barça se parara y se volviera positiva. Esto lo hizo Ronaldinho. Cambió el rumbo astral del barcelonismo, que se ha aguantado hasta ahora".
A la espera de conocer el contenido íntegro de la entrevista, Rosell también manda un recado a Joan Laporta, su antecesor y ahora enemigo: "Yo no quiero ser President de Catalunya ni quiero ningún cargo político".