El exjugador del Barça, Gerard Piqué, ha comentado este martes la situación judicial de su excompañero Dani Alvés y ha reconocido que se trata de un caso de gran complejidad.
En este sentido, ha constatado que lo que sencillamente quiere es que la justicia haga su trabajo. “Hasta que no me digan que lo ha hecho y que hay pruebas creo debemos esperar”, ha dicho en una entrevista en El Món a Rac1 recogida por Servimedia.
En su opinión, lo más fácil hoy en día es decir que ya es culpable y que merece lo que sea, la penalización que sea. “Yo quiero esperar y esperar a lo que diga el juez”. Y cuando esto se produzca, acatarlo, indicó.
El jugador brasileño, que está casado con la modelo Joana Sanz, ha sido acusado de presuntamente violar a una joven en Barcelona el pasado mes de diciembre y, desde finales de enero se encuentra en prisión provisional a la espera de juicio. Piqué ha reconocido que para él y para los que son o han sido compañeros de Alves todo este caso es muy difícil.
Ha recordado que cuando se es compañero de vestuario se comparten horas dentro el terreno de juego, pero también fuera. “Lo ves actuar y no lo pensarías nunca y te quedas en estado de shock”. Para el excentral del Barça, si los hechos sucedieron cree que se debe actuar con dureza y ayudar a la víctima en todo el proceso.