Día emocionante para Rafa Benítez, que después de no poder hablar en su presentación embargado por la emoción, mostró un perfil bajo en la rueda de prensa ante los periodistas. Especialmente significativa fue su docilidad en la referente al tema de los fichajes, sobre todo porque aún se le recuerda cuando, en su etapa en el Valencia, saludó la llegada de Canobbio advirtiendo: "He pedido un sofá y me han traído una lámpara". En esta ocasión no habrá sofás ni lámparas. Se conformará con los muebles que Florentino le compre. "Llevo mucho años en el fútbol y tengo experiencia trabajando con diferentes estructuras. Haré lo que me pida el club. Daré mi opinión, pero no me preocupa quién decida. Yo trataré de sacar el máximo rendimiento a los jugadores de que disponga", señaló.
Sin embargo, en la charla con José Ángel Sánchez, director general del club, Rafa Benítez dio una serie de indicaciones que esperan sean oídas. Entre ellas hay alguna significativa. Benítez quiere fuera a Iker Casillas en caso de concretarse el fichaje de De Gea, porque no quiere revivir la tensión mediática que soportó el club la pasada temporada por el debate abierto en la elección entre Casillas y Diego López. Benítez prefiere evitar ese conflicto, pero para evitarlo el Real Madrid tendrá que hacer un desembolso importante en el que se incluyen los 30 millones de libras que pide el Manchester United por el traspaso de De Gea y los 14 millones netos que debe pagar a Casillas para finiquitar el contrato de dos años que tiene firmado con el Real Madrid.
Otro de los temas que se ha hablado es la posibilidad de que haya algún cambio en la delantera. El hombre que podría salir es Benzema, por quien hay suculentas ofertas de Inglaterra. A Florentino le seduce la idea de traer a Agüero, pero preguntado por sus preferencia, el nombre que ha sugerido Benítez, que sabe que tiene voz pero no voto, es del un viejo conocido de la afición madridista y un hombre de su total confianza: Gonzalo Higuaín. El ex madridista conoce la casa y ha rendido a muy buen nivel en el Nápoles con Benítez anotando 24 goles en la primera temporada y 29 en la segunda. Un total de 53 tantos en 101 partidos. Pero la llegada de Pipita es poco probable, porque el presidente siempre mostró su preferencia por Benzema frente al argentino y hay una parte de la grada que criticó abiertamente al delantero.
Resta saber finalmente en qué acabará todo. Fichado Danilo, el próximo en llegar debe ser De Gea (pendiente de acordar un traspaso con el Manchester United), lo que debería acelerar la salida de Casillas. Verratti, Agüero y Sterling son otros de los nombres que están sobre la mesa. Además de los regresos de Casemiro, previo pago de 7,5 millones al Oporto, y de Cheryshev. A partir de ahí, es una incógnita el nombre de las bajas, pero habrá y alguna será de relumbrón, a juzgar por las ofertas que llegan a la Casa Blanca.