Es difícil encontrar hoy un equipo como este Atlético que tenga tan claros los conceptos posicionales, tácticos, la parte de trabajo que tiene el fútbol. Los defensas del Atlético no cuentan ovejas para irse a dormir pues no pueden imaginar otra cosa que no sean ayudas, posiciones, coberturas y saltos. Una vida entera en torno al fútbol. Más allá del discurso de Simeone hay una cosa obvia en este equipo: donde no llega el talento llega el trabajo. No está pensado para emocionar a los niños o para mostrar en un museo, pero tampoco esa fue nunca la pretensión. Ganar sabe, desde que llegó el Cholo, una Liga Europa, una Copa, una Liga, una Supercopa de España y otra de Europa. La edad de oro.
Es difícil encontrar hoy un equipo como este Atlético que tenga tan claros los conceptos posicionales, tácticos, la parte de trabajo que tiene el fútbol. Y si excluimos a Italia, quizá en la historia. También domina la estrategia, que suele ser el punto de desequilibrio que desahoga con goles el trabajo de una defensa descomunal.
Por si todo esto fuera poco, el partido del Calderón tras el 1-1 del Bernabéu comenzó con un gol rojiblanco, concretamente de Mandzukic, quien reveló sus cualidades. Si cae un yunque del cielo, él acudirá presto para rematarlo y lo conseguirá, contra viento y marea, contra lo que sea. Esa es la nueva estrategia central del Atlético en ataque, si toca correr: Griezmann; si vuela el balón: Mandzukic.
En este tercer párrafo toca hablar del Madrid, y si no se ha hecho antes es porque, realmente, vivió la vuelta de la Supercopa de España a remolque del Atlético. Claro que tuvo más balón, por supuesto que atacó, pero siempre de un modo estéril, ahogado en la marea que se compone entre las líneas defensiva y de media de los rojiblancos.
Los de Ancelotti no tienen el antídoto, se encomiendan a un golpe de gracia y esos, especialmente en pretemporada, son perezosos y escasos. Cada vez que Bale cogía el balón se encontraba a tres rivales encimándole y, como él, cualquier atacante del Madrid. Las musas se evaporan ante tanta presión. Si los centrales del Atléti sueñan con líneas defensivas, los del Madrid lo hacen con murallas rojiblancas. Son pesadillas.
El Madrid, que se enchufó al final de la primera parte, perdió el norte completamente en la segunda. Se fue Kroos y el equipo perdió hechuras y la pregunta es por qué el alemán. Primero, por error del técnico. Segundo, por galones. Xabi Alonso, que no está conectado, no suele salir. De momento, es más fácil quitar al recién llegado. El mejor partido de la pretemporada, contra el Sevilla en la Supercopa de Europa, no tuvo al tolosarra por sanción. Igual, y hasta que se enchufe, es una pista para Ancelotti.
Glosado queda en esta crónica lo mejor del Cholo, lo que hace a los suyos creer, el perfecto trabajo que les lleva a ser candidatos a la Liga y, en realidad, a lo que se propongan. Eso, que es cierto, no esconde su faceta de marrullero, que la tiene. Fue expulsado en la primera parte por encararse con el cuarto árbitro en una reclamación. No es solo visceralidad, también es parte de la estrategia y eso ya no es fútbol, por mucho que haya técnicos que lo conciban así.
El Atlético es el supercampeón, lleva meses siendo el mejor equipo del país. Se volverá a decir que no aspiran a ganar los títulos, que no pueden competir. No les crean, el campeón va muy en serio y de momento ya ha vengado la cruel derrota de Lisboa.
Ficha técnica:
Atlético: Moyá; Juanfran, Miranda, Godín, Siqueira; Raúl García (Saúl, m. 89), Gabi, Tiago, Koke; Griezmann (Raúl Jiménez, m. 72) y Mandzukic (Cristian Rodríguez, m. 83).
Real Madrid: Casillas; Carvajal, Varane, Sergio Ramos, Coentrao (Marcelo, m. 70); Kroos (Cristiano Ronaldo, m. 46), Modric, Xabi Alonso; Bale, Benzema y James (Isco, m. 65).
Gol: 1-0, m. 2: Mandzukic, de tiro raso junto al poste tras un toque de cabeza de Griezmann.
Árbitro: Fernández Borbalán (C. Andaluz). Expulsó a Diego Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, en el minuto 25, y a Luka Modric por doble amarilla en el Real Madrid en el minuto 90. Amonestó a los locales Mandzukic (m. 18), Koke (m. 51), Griezmann (m. 68) y Raúl García (m. 73) y a los visitantes Xabi Alonso (m. 53), Isco (m. 79), Sergio Ramos (m. 88) y Bale (m. 90).
Incidencias: partido de vuelta de la Supercopa de España, disputado en el estadio Vicente Calderón ante 54.000 espectadores. Lleno.