El Real Madrid ha conseguido, en solo dos semanas, reinstalar la ventaja que tenía en la clasificación antes de naufragar en el Calderón. El fútbol tiene estas cosas, que los grandes se dejan puntos cuando menos se espera. Y en lo que queda de Liga es poco probable que alguno sea infalible. Los blancos ganaron en Elche en un partido muy bien labrado por el Madrid, fue un 0-2, pudieron ser muchos más.
Los de Ancelotti fueron mucho mejores que sus rivales, vivieron en el área contraria y solo los detalles les alejaron de una gran goleada. Es posible que el Elche no sea el mejor equipo para medir el nivel de forma de un conjunto, pero era el que tenían enfrente y lo solventaron con nota.
Si no marcó más fue por el palo, por los penaltis que fueron y no se pitaron, por los fueras de juegos en los que incurrieron por micras –mención especial una tijera de Benzema que no subió al marcador, pero era una obra de arte- y también porque el portero del Elche, Tyton, tuvo una buena tarde.
Como el juego se desarrolló fundamentalmente en el último tercio del campo, los que brillaron fueron los delanteros del Madrid. Cristiano, Bale y, sobre todo, Benzema. El francés es de esos delanteros que se siente feliz con el balón y encuentra todas las triquiñuelas para tratarlo con cariño. Dio un recital de recortes, paredes y fintas, abasteció a sus compañeros y demostró, una noche más, que es uno de los mejores delanteros del mundo. Y también uno de los más bonitos. Su asociación con Isco, que habla su mismo idioma, es una de las más productivas que tiene Ancelotti a su cargo. El centro del campo hizo su labor, los laterales ayudaron en el ataque y de los centrales y el portero poco se puede decir, no tuvieron mucho trabajo. Casillas, eso sí, cumplió 500 partidos en Liga. No es poca cosa.
El Madrid se aprovechó también de los muchos errores del Elche, un equipo que, además, decidió que era noche para repartir estopa. Mención especial merece una patada de Aarón a Bale, que no vio la roja pero la debió ver. Inadmisible en un campo de juego, con los tacos por delante, con fuerza y la pierna alta. No fue la única que se vio, el Elche pegó mucho, pero sí la más dura y condenable.
Y el Madrid, que había tenido muchos problemas en Córdoba, que había sido un desastre en el Manzanares, por fin sacó una salida con nota alta, no solo por la victoria sino también por la manera de conseguirla. Y ese es el camino si quieren llegar a su mejor versión. Los cimientos están puestos. De momento, y como hace quince días, los blancos sacan ya cuatro puntos al Barcelona y siete al Atlético. Es decir, tienen espacio para pinchar y seguir arriba.
Elche 0: Tyton; Damián, Roco, Lombán, Albácar; Rodríguez, Adrián (Herrera, m. 80), Pasalic (Gálvez, m. 74), Aarón (Rodrigues, m.63); Fajr y Jonathas
Real Madrid 2: Casillas; Carvajal, Pepe, Varane, Marcelo; Lucas (Illarramendi, m.83), Kroos, Isco (Arbeloa, m. 88), Cristiano, Bale y Benzema (Jesé, m. 90)
Goles: Benzema, 0-1 (m.56). Cristiano, 0-2 (m.69).
Árbitro: Iglesias Villanueva. Amonestó a Albacar, Jonathas, Aaron y Marcelo.
Martínez Valero.
