El Real Madrid ha abierto el plazo para presentarse a socio compromisario, que va desde el 9 al 23 de marzo. Una vez recibida las candidaturas, el día 23 la Junta Electoral las examinará y en los millares en los que se hayan presentado más de 29 socios convocará elecciones, mientras que en los que no se haya llegado a esa cifra saldrán elegidos automáticamente. Para ser socio compromisario hay que presentar una papeleta, que se recoge en el club, firmada por tres socios. Esas elecciones están previstas para la primera semana de mayo. Se elegirá un total de 1.993 socios, además de los 100 socios más antiguos y los expresidentes del club, siendo compromisarios durante los próximos cuatro años. Así, se eligen poco más de 2.000 compromisarios de los 91.000 socios que tiene el club. Y votan sólo los mayores de edad con un año de antigüedad como socio en el Real Madrid.
Nunca en la historia del club se había completado los socios en cada millar, por lo que a los elegidos automáticamente se les completaba con socios elegidos por sorteo. Pero en la últimas, celebradas en 2012, fueron las primeras de la historia de la entidad en las que hubo que organizar comicios en muchos millares porque había una presentación masiva. Casualmente hubo compromisarios históricos, que habían mostrado su oposición a la gestión de Florentino Pérez que se quedaron fuera como Eugenio Martínez Bravo, Martínez Laredo, Paco Moreno Cariñena...
¿Qué capacidad de decisión tiene la Asamblea de compromisarios?
Según los Estatutos del club, "La Asamblea es el órgano supremo de gobierno del Club a quien corresponde, entre otras funciones, la aprobación y ratificación o la censura del Presidente y de la Junta Directiva". Además, los compromisarios disfrutan de una serie de ventajas respecto al resto de socios como visitas guiadas a la Ciudad Deportiva, compra preferente de entradas de fútbol y baloncesto, derecho a dos entradas para los partidos del Real Madrid Castilla, derecho a dos entradas para realizar el Tour del Bernabéu o dos invitaciones para asistir a cualquier encuentro de baloncesto de la liga regular que se celebre en el Palacio de los Deportes.
¿Cómo se puede dirigir el voto o manipular la votación?
Un socio que quiera presentarse a compromisario puede presentar su candidatura, pero solo dispone de las listas de socios el club y no se las facilita a los socio. Así que uno se postula para socio sin conocer ni poder dirigirse a su millar para presentar su candidatura. Es un sistema perverso. Suele ser bastante común que las asociaciones de peñas y las plataformas con socios se pongan de acuerdo entre sí para ver qué números tienen sus socios y confeccionar listas para pactar el voto cruzado entre ellos... Así se da poder a esas plataformas y limitas a aquellos candidaturas individuales. Se produce un movimiento de organización de grandes peñas oficialistas que están cerca del Madrid y que mueven gente que promueven, con el beneplácito de gente del propio club, que salgan personas y listas favorables a los intereses de la junta directiva. Una maniobra que se ha producido con todos los presidentes. En las últimas elecciones a compromisario se presentaron casi 3.500 candidaturas y hubo elecciones en casi todos los millares. En algunos fue especialmente significativo. Lo confiesa Eugenio Martínez Bravo, uno de los opositores que más se ha significado en contra de la gestión de Florentino: "En mi millar fue espectacular. Se batió el récord. Por eso no salí yo. Y tampoco el resto de candidatos que eran críticos".
El único que tiene toda la información es el club, que conoce la lista de candidatos y la de los socios de cada millar que les tienen que votar. En las elecciones a compromisario sólo se facilita el nombre de los que se presentan en cada millar. Las listas de cada millar no circulan porque es algo ilegal, pero lo que sí se puede encontrar son esas listas que circulan entre las peñas de socios que comparten información entre ellas y acaban condicionando el sistema de votación. Así, es sencillo deducir que la presidencia solo tienen que recabar el apoyo de las grandes asociaciones y plataformas de socios.
¿Existe una solución?
La forma de hacer que no se produzca una elección dirigida es adoptar otras formas de elección de los compromisarios o liberar la información para que los socios pudieran dirigirse a sus potenciales votantes, los socios de su millar. En el Fútbol Club Barcelona, por ejemplo, se produce un sorteo por el cual eligen a sus 6.000 compromisarios, garantizando así la neutralidad de la elección.
Esta manera perversa de elegir a los socios compromisarios, permite dejar fuera de la lista de compromisarios a los socios opositores. Desde siempre, los presidentes del club han controlado la Asamblea. Además las elecciones a socio compromisario están estratégicamente colocadas a mitad de legislatura, permitiendo que la directiva pueda centrarse sin ningún tipo de incovenientes en 'trabajarse' la formación de una Asamblea de compromisarios amable. El único caso en que hibo cierto atisbo de independencia fue durante el mandato de Vicente Boluda, que instauró el voto secreto y provocó un cambio en el voto por correo, que se realizó como en la Ley Electoral, algo que deshizo inmediatamente después Florentino al regresar al club, promoviendo el actual sistema de elección de los socios compromisarios.