Uno de los escándalos más turbios de la era reciente del deporte norteamericano le ha explotado en las manos a un nombre clásico del baloncesto como Rick Pitino, 'hall of famer', dos veces campeón de la NCAA y ex entrenador de los Boston Celtics.
El neoyorkino, actual entrenador jefe de la Universidad de Louisville, ha visto como, tras de un año de detalladas investigaciones, la NCAA acusaba formalmente a su 'college' de utilizar a prostitutas para reclutar a jugadores estrella para su programa de baloncesto.
El centro del estado de Kentucky dispone ahora de noventa días para presentar alegaciones que impidan la asunción una fuerte sanción que podría incluir hasta la pérdida del título nacional conseguido en 2013. Lo que la NCAA no ha podido determinar aún es si el propio Pitino tenía conocimiento de la trama sexual urdida por su ayudante, Andre McGee, algo de lo que la leyenda se ha apresurado a desmarcarse.
Pitino se declara inocente y afirma no conocer nada sobre las "actividades indebidas" en las habitaciones de los que iban a ser futuros jugadores suyos, pero sí es acusado de no supervisar convenientemente las funciones de su subordinado. "Creemos que McGee actuó de forma furtiva y que ningún empleado de la universidad sabía nada al respecto", han dicho desde Louisville. El entorno del 'coach' reza para que eso sea cierto.
