Tras la decisión de los técnicos de la selección española de baloncesto de hacer de Xavi Rabaseda el último descarte del equipo en su camino al EuroBasket, la lista de los doce hombres que pelearán en Alemania y Francia por estar en los proximos Juegos Olímpicos está confirmada.
Con Álex Abrines lesionado y Dani Díez y Quino Colom descartados desde el 9 de agosto, la última incógnita a despejar era si Scariolo y su grupo de trabajo se decidirían por Rabaseda o Pablo Aguilar. Finalmente, contra pronóstico, será el segundo el que ocupe plaza en la expedición final. Por tanto, así queda la España que tratará de luchar por las medallas en el Stade Pierre-Mauroy de Lille:
Sergio Rodríguez (base): Sin Ricky Rubio y José Manuel Calderón por encima en la rotación, por fin el tinerfeño podrá tener los galones suficientes como para soltarse el pelo. Si consigue imprimir su ritmo, será siempre una buena noticia para una España a la que veremos correr. La Selección necesita al Chacho mágico del Real Madrid.
Sergio Llull (base): Su tan debatida transición del puesto de escolta al de base en el Real Madrid es probable que se vea revertida en la Selección. Tras la baja de Abrines, no vendrá mal que eche una mano en la anotación. Ha sido el jugador que más en forma ha terminado la temporada en el baloncesto español.
Guillem Vives (base): Acude al EuroBasket como tercer base, con la misión de madurar con la experiencia y absorber todo el aprendizaje posible. Irregular durante algunas fases del curso en Valencia, su explosión de baloncesto en los playoffs de la Liga Endesa fue formidable. Apuesta personal de la dirección deportiva de la FEB.
Pau Ribas (escolta): La importancia de su rol se ha multiplicado tras la lesión de Álex Abrines. Su temporada ha sido extraordinaria, llamando la atención de un FC Barcelona Lassa que ha adquirido su polivalencia de cara al próximo ejercicio. Debe dar un paso adelante y mostrar con la Selección la fiabilidad y la personalidad que le han hecho estar en el último Quinteto Ideal ACB.
Rudy Fernández (escolta-alero): Tirando del carro en muchos partidos de la preparación, será el hombre referencia de Scariolo en el perímetro. El transalpino valora el mucho daño que le hace a sus rivales en ataque, pero también su sacrificio a la hora de defender reconvertido al puesto de 'tres'. Su capacidad para saltar indistintamente del escolta al alero a nivel FIBA es fundamental.
Fernando San Emeterio (alero): Dureza, sobriedad y esfuerzo. Sacrifica con España su rol más lucido del Baskonia (aunque este año se mudará a Valencia) para ponerse el mono de trabajo. Tirador fiable, podrá ser revulsivo en ocasiones. Su experiencia y madurez son garantía para un Scariolo que la ha alabado públicamente en varias ocasiones.
Víctor Claver (alero): Con Aguilar por Rabaseda dentro del corte final y con Carlos Suárez fuera de todo planteamiento de Scariolo, a Claver le tocará asumir el papel al que durante tanto tiempo pareció destinado: ser alero alto. Olvidándose del rol de ala-pívot que ha ocupado tradicionalmente con España, deberá jugar más de cara, mirar al aro desde fuera y, en definitiva, despejar las muchas dudas que se tienen sobre él.
Felipe Reyes (ala-pívot): Olvidado ya el sinsabor de apenas contar para Orenga, Felipe se desquitó con una temporada sobresaliente en el Real Madrid. Todo un MVP de la ACB que cada año parece más fresco y más completo. La mejor versión del pequeño de los Reyes le servirá a Scariolo para desenmarañar muchos partidos.
Nikola Mirotic (ala-pívot): Talento puro. Será el desatascador ofensivo de España en más de una ocasión. Sus fundamentos le hacen capaz de anotar desde prácticamente cualquier rango y en cualquier suerte del juego. Querrá reivindicarse para ganarle terreno a Serge Ibaka de cara a convocatorias futuras.
Pablo Aguilar (ala-pívot): Su temporada en Valencia Basket ha sido más bien discreta (de hecho, ha acabado haciendo las maletas en dirección a Gran Canaria), pero las circunstancias han terminado por hacerle un hueco. Trabajador, humilde, bueno en el dentro-fuera y con una muñeca interesante.
Pau Gasol (pívot): El mejor jugador de la historia del baloncesto español vuelve a hacer sitio en su agenda para acudir a la cita veraniega con la Selección. Querrá arreglar el desaguisado grupal de hace un año, en la Copa del Mundo. A nivel FIBA, hay poquísimos interiores tan decisivos como él.
Willy Hernangómez (pívot): El futuro del baloncesto español en la pintura. El EuroBasket será una mili para él. Joven, aunque contrastado ya en ACB tras una temporada en Sevilla que ha provocado que el Real Madrid le repesque. Ya escucha los cantos de sirena de la NBA.
