Franko Skugor, un tenista sin apenas repercusión y fijado por la ATP más allá de los 200 primeros jugadores del mundo, salvó tres puntos de partido para imponerse a Pablo Carreño, superado por la responsabilidad, la presión y su rival, y dar a Croacia el primer punto de la eliminatoria contra España (3-6, 6-3, 6-4, 4-6 y 7-6(6)), de la primera ronda del Grupo Mundial de la Copa Davis.

En un partido dramático, Carreño desperdició una ocasión única para constatar sus posibilidades como jugador de la Copa Davis. Pero después de enderezar una situación complicada y un marcador en contra, fue incapaz de rematar a un adversario contra las cuerdas.

Tuvo su ocasión el español en el quinto set. El momento para culminar su remontada. Se situó con 3-0 en la manga decisiva y con 5-3 sacó para cerrar el partido. No pudo. Presa de la tensión dejó escapar su servicio y volver al partido a su rival. A continuación, al resto, tuvo tres puntos de partido. Pero Skugor se sostuvo, aguantó y llevó el desenlace al 'tie break', donde fue el mejor de un partido dramático.

Cuatro horas necesitó el croata para sacar adelante el choque. No le pesó la responsabilidad a Skugor, ataviado de la condición de número uno de su equipo tras las bajas notables de Marin Cilic, Ivo Karlovic o Borna Coric.

A continuación, Roberto Bautista se enfrentará a Ante Pavic para intentar enderezar la situación de España en su primer compromiso en la elite tras su regreso al Grupo Mundial.

Pablo Carreño, que asumió su segunda participación en Copa Davis tras su debut frente a Rumanía la temporada pasada, tuvo una buena irrupción en la pista. Resolvió a su favor, en 36 minutos, la primera manga. Siempre fue por delante desde que se apuntó el primer juego en blanco, con tres errores de Skugor y el punto definitivo con un saque directo. El español solo se vio apurado en el quinto juego cuando tuvo que salvar cinco bolas de rotura.

El segundo set provocó la transformación de Skugor, que se apuntó el primer juego, fue de menos a más y se mostró como un jugador más ágil, lejos del estático que esperaba al fondo de la pista en el primer set.

Empezó a desplegar un juego agresivo, certero en el saque y obligó a Carreño a recorrer la pista de derecha a izquierda para el resto.

El español respondió a la potente derecha de Skugor para mantener la igualdad inicial, con una bola que el croata esperaba mucho más larga, pero el juego siguiente supuso el despegue definitivo del croata para equilibrar el partido con un 3-2 a su favor que Carreño no logró contrarrestar.

Después de romperle el servicio y, pese a que el español ajustó el marcador de nuevo a 5-3, Skuggor sirvió para cerrar el segundo set, algo que hizo con otro juego en blanco, en el que Carreño le facilitó el último punto después de otros 36 minutos.

En pleno crecimiento, el croata, que como mérito mayor tiene la final del torneo de Umag en dobles junto a Dusan Lajovic en el 2014, mantuvo su buen nivel ante la ofuscación del español, que no encontró la manera de compensar la pérdida del servicio que terminó por dar el set a Croacia.

Con Skugor por delante en el marcador Carreño afrontó el cuarto parcial sin margen de error. Mantuvo el tipo ante el buen momento del balcánico. Cada tenista mantuvo su saque. El español aguardó a su oportunidad y arrebató el servicio a Skugor en décimo juego, para cerrar el set al resto e igualar el marcador.

Acusó la nueva situación el croata. Carreño se situó con 3-0 en el quinto y mantuvo la distancia hasta que le pudo la presión. Con 5-3 y el saque en la mano fue incapaz de rematar el partido ante su rival. Skugor rompió sin problemas el saque y después se sostuvo a pesar de los tres puntos de partido del español. En el desempate rentabilizó la seguridad de su saque para cerrar el partido y adelantar a Croacia en la serie.