La nadadora paralímpica española, Teresa Perales, ganadora del mismo número de medallas olímpicas que Michael Phelps (22), dice que con la beca pública que recibe no puede "ni pagar las horas de piscina" en la que entrena.
"Mi beca no me cubre ni la piscina, una hora al día durante cinco días a la semana", se quejó Perales, quien subrayó que pese a que esta "difícil" situación no le empuja a dejar el deporte, "sería mucho más sencillo" si tuviera un soporte económico que le permitiera dedicarse a entrenar "sin preocupaciones".
Para Perales, actual campeona paralímpica, los atletas olímpicos y los paralímpicos "no tienen nada que ver" en cuanto a recursos económicos o reconocimiento: "es como el elefante y la hormiga", comparó. "Ni con todos los recortes que han sufrido (los atletas olímpicos) tienen lo que tenemos nosotros, por debajo claro", precisó Perales.
Pese a ello, la nadadora celebró la entrada en el Consejo Superior de Deportes (CSD) de los deportistas paralímpicos de alto rendimiento, así como que la presencia en los medios de comunicación de los atletas con discapacidad se haya visto acrecentada en los últimos años.
"Desde las Olimpiadas de Londres (2012) se mejoró mucho respecto a los medios, aunque sigue siendo raro ver titulares antes costaba salir hasta en pequeños artículos a pie de página, ahora es más normal, ya abrimos telediarios y antes era impensable", saludó la nadadora parapléjica.
Además, la abanderada española en la ceremonia de inauguración de los paralímpicos de Londres 2012 donde se alzó con seis metales en seis pruebas, entre ellas el oro en 100 metros braza, lamentó que el deporte no sea considerado "una actividad básica en la vida diaria" pese a "transmitir valores y habilidades válidos para todo".
"Todo necesitamos referentes y los deportivos son un ejemplo. Es importante cultivar y mantener esa elite deportiva para favorecer que podamos estar arriba pero no estamos viviendo la situación más sencilla del mundo", dijo en referencia a la actual crisis económica española que también ha dañado al deporte.
Sobre un posible atraso de su retirada marcada para después de los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro en 2016, la nadadora de 38 años reveló que ya ha dicho antes que dejaba el deporte de elite y que luego ha hecho "lo contrario".
"Me gusta dejar las puertas abiertas por si acaso, tengo bastante claro que me retiro pero también lo he dicho antes y luego he pensado: cómo me voy a retirar en la cumbre", expresó Perales a quien le gustaría retirarse "en lo más alto del podium" pero que reconoce que "un deportista se retira cuando le ganan y cuando ve que ya no puede más".
"En principio me retiro en Río (de Janeiro), pero todo puede pasar", apostilló Perales, quien participó en Sao Paulo del Primer Foro de Gestión Deportiva, organizado por la escuela navarra de negocios IESE y por el banco Santander Brasil.