El edil de la localidad gallega de Paradela, pueblo natal del guardameta Diego López, ha escrito una carta a Vicente del Bosque en la que, entre otras cosas, manda "callar" al seleccionador nacional y deje "de meter los dedos en los ojos de los técnicos del Real Madrid y la nariz en los pucheros de los medios".
Esta es la carta íntegra de José Manuel Mato
Ilustrísimo Sr. Marqués:
Ante las abundantes opiniones emitidas por V.I. sobre la titularidad de Don Diego López en el Real Madrid, mi conciencia no deja de dar vueltas al asunto. He ido asistiendo a cómo ha faltado al respeto en varias ocasiones a nuestro vecino Don Diego López dejándose influir por grupos de presión o por otras causas que no llego a comprender.
Tiempo atrás dijo: "Iker Casillas es uno de los nuestros". Una vez más cometía una falta de respeto hacia ese jugador al no nombrarlo. ¿No era nadie? ¿Quiénes, cuántos y por qué son "el grupo"? ¿Son etnia, familia, secta, tribu, banda, pandilla o clan?
Diego López sí es uno de los nuestros, paradelense, lucense, gallego y español reconocido. No puede denigrarse a nadie para ensalzar a otra persona, eso es una vileza. Nunca hemos logrado arrancarle una crítica hacia ningún jugador, entrenador o árbitro. Ni ahora mismo que posiblemente tendría algo que decir.
Se calla, aprieta los dientes y a luchar por sí mismo, por su familia y por los colores que siempre admiró.
Ya que ostenta el título de Marqués me gustaría recordarle que la nobleza es generosidad, honradez y total ausencia de maldad, pero en sus últimas declaraciones se echa en falta esta virtud. Me gustaría recomendarle que dejara de meter los dedos en los ojos de los técnicos del Real Madrid y la nariz en los pucheros de los medios. No siga por ese camino, céntrese en su labor y luche para lograr la excelencia en su trabajo.
Su Ilustrísima está obligado a ser noble, justo, objetivo e imparcial por su categoría profesional y por el marquesado que ostenta. Permítame rematar tomando una frase prestada de Su Majestad el Rey. "¿Y por qué no te callas?".
Reciba un cordial saludo.
José Manuel Mato Díaz
