El finalista del concurso de ‘Supervivientes’ ha señalado que la experiencia de ‘Supervivientes’ ha sido una de las más increíbles que se pueden vivir pero a la vez de las más duras. Su paso por el concurso le ha pasado factura, tal y como cuenta en la revista ‘Lecturas’, y le ha dejado secuelas físicas y psicológicas.
A simple vista se aprecia que está mucho más delgado. Albert Álvarez regresó con menos masa muscular después de perder 15 kilos. El hambre que pasó ha provocado que tenga conductas extrañas como éstas: “Llegué y me guardaba comida en el bolsillo y, a veces, aún tengo la necesidad de terminarme todo lo que tengo en el plato”, ha confesado Albert. Otra de las secuelas que ha señalado que tiene es que “en cuanto noto algo de hambre me entra ansiedad”.
También ha contado que cuando llegó a España tuvo que dormir en el suelo porque “no estaba cómodo en el colchón”, y que el techo de su habitación “le genera ansiedad”.
El deportista sigue convencido de que su enfrentamiento con Isabel Pantoja le ha pasado factura y le ha alejado de ser el ganador del reality de Mediaset. Recordemos que la tonadillera pidió el voto para el exnovia de su hija, Omar Montes, con el que hizo muy buenas migas, y que fue el ganador de ‘Supervivientes 2019’. A pesar de todo esto, el concursante no dudaría en volver a participar en el concurso.
En la revista, Albert ha hablado también de algunos de los episodios más controvertidos de su vida, como su complicada adolescencia y la forma en la que el deporte le apartó de las calles.
