Si hay una persona influyente en el mundo de la moda, esa es Anna Wintour. Se trata de la editora jefe de la versión americana de Vogue, todo un icono incluso para aquellos que no se interesan por las tendencias. Eso se consigue gracias al misterio que la rodea, los libros y películas que han surgido inspirados en su figura y a llevar décadas gobernando como una reina absolutista los hilos de la industria de la moda más allá de los Estados Unidos.
Wintour vuelve a estar de actualidad y esta vez se debe a su vida privada. El día 3 de noviembre ha cumplido 70 años pero parece que la jubilación no está prevista en su agenda. Eso sí, su imagen sigue siendo imperecedera, como si hubiese hecho un pacto con el mismísimo Diablo, al que parece que representa en la Tierra día sí y día también. Esa imagen de la que hablamos va más allá de una estética, es un icono. Su nombre va ligado irremediablemente a un corte de pelo estilo "bob" y a unas grandes gafas negras que ocultan su mirada.
Cada día, esta Reina de la Moda se despierta entre las 4:00 y 5:30 horas, lee la prensa, juega al tenis, desayuna un café de Starbucks y se encamina sobre las ocho a las oficinas de Vogue para dirigir la revista de moda más importante del mundo. Una rutina que ha seguido escrupulosamente durante las 3 décadas que lleva al mando de la publicación estadounidense.
Vogue es la revista de Anna, sería correcto considerarla como la Papisa
En la revista todo lo que se publica, absolutamente todo, tiene que estar confirmado por ella. Sólo ella decide que saldrá o no publicado. "Vogue es la revista de Anna, ella es quien la firma. Sería correcto considerarla como la Papisa", afirmaba Candy Pratts, directora ejecutiva de la revista en el documental 'The September Issue'. Este documental es una joya imprescindible para cualquier persona que se dedique al mundo de la moda o sea un apasionado de ella. Se trata de una cinta que recorre la preparación del Vogue USA de septiembre, el número más importante del año.
Los comienzos de Anna Wintour en el periodismo
Pero llegar a manejar el timón de una de las revistas más importantes del mundo no es algo que se consiga de la noche a la mañana. Wintour ya nació con el periodismo en las venas y es que su padre dirigía el periódico 'Evening Standard' y su hermano es editor en 'The Guardian'. Así que terminar trabajando en una editorial era cuestión de tiempo.
Su pasión por el mundo de la moda viene desde que era pequeña. Su primera relación laboral fue de adolescente trabajando como dependienta en tiendas de ropa, pero eso duraría poco ya que con 20 años fue contratada por la revista Harper's & Queen, lo que supuso el comienzo de su carrera en el periodismo de moda.
Sus innovaciones en Vogue UK causaron tanto revuelo que terminó siendo despedida
Su buen trabajo periodístico hizo que fuese subiendo peldaños en diferentes publicaciones de Estados Unidos e Inglaterra. Así empezó a firmar en prestigiosas cabeceras como Harper's Bazaar o la edición británica de Vogue. En esta última su llegada fue toda una revolución, algunas de sus innovaciones causaron tal revuelo que terminó siendo despedida. Pero para Wintour eso no era un problema, sabía que su futuro estaba en Vogue USA y no paró hasta conseguir una entrevista de trabajo. Esta entrevista se realizó en 1982 de la mano de la que era la editora jefe en ese momento, Grace Mirabella, a la que Wintour confesó, sin ningún tipo de miramientos, que su objetivo era quitarle el puesto de trabajo. ¿Un farol? Nada de eso, una jugada maestra ya que lo conseguiría sólo 6 años después de aquella charla.
La Era Wintour de Vogue
Así comienza la llamada "Era Wintour" de Vogue, con el lanzamiento de su primera portada en el número de noviembre de 1988. Por supuesto, la foto de la portada era toda una revolución, nuestra protagonista decidió que la modelo luciera unos vaqueros básicos junto a una chaqueta de alta costura de Christian Lacroix. Hoy nos parecería de lo más normal, pero era la primera vez que unos jeans salían en portada. Su objetivo era acercar el mundo de la moda a la mujer del momento con una visión diferente y más actualizada.
Anna vio venir la cosa de las celebrities antes que todos los demás
Sin embargo, este ería el primero de muchos cambios que viviría Vogue bajo sus órdenes. Otra de las grandes innovaciones que hoy asumimos como normal es la aparición de actrices y cantantes famosas en las portadas, antes sólo protagonizadas por modelos profesionales. Su empeño en colocar rostros muy conocidos supuso un exitazo en ventas. "Anna vio venir la cosa de las celebrities antes que todos los demás", dijo en una ocasión Grace Coddington, directora creativa de la edición norteamericana y otro de los iconos vivos de la moda gracias a libros biográficos y a ser una de las protagonistas del 'The September Issue'
No puedes triunfar en la moda sin la bendición de Anna
Pero su mandato no sólo se rige en Vogue, su poder e influencia traspasa las fronteras de la revista y llega al entramado empresarial de la moda. Su bendición es capaz de llevar al estrellato la carrera de diseñadores y marcas, como fue el caso de John Galliano en Dior o de Marc Jacobs. También ocurre lo contrario, su rechazo supone la aniquilación en el panorama de la moda. "Puedes hacer una película en Hollywood sin la bendición de Steven Spielberg y puedes publicar un software sin la bendición de Bill Gates, pero no puedes triunfar en la moda sin la bendición de Anna", sentenció R.J. Cutler, director del documental.
Este poder hace que su poder de convocatoria sea envidiable, ella es la organizadora de la gala de la moda del Met en Nueva York donde cada año desfilan las principales estrellas del momento como Beyoncé o George Clooney.
Después de años en la cumbre del periodismo de moda, Wintour ha dado para todo tipo de mitos y leyendas. La más famosa es la que dicen que fue la inspiración para el personaje protagonista de 'El diablo viste de Prada', la novela superventas escrita por Lauren Weisberger y publicada en 2003. Weisberger fue asistente de Wintour en Vogue y su obra narra la experiencia de Andrea Sachs, una joven periodista que comienza a trabajar como asistente de Miranda Priestly, la redactora jefe de una famosa revista de moda llamada Runway. ¿Pura coincidencia?. El éxito del libro fue tan grande que dos años más tarde ya se estaba rodando la película. El papel principal fue para Meryl Streep que ganaría el Globo de Oro por este personaje.
La película de 'El Diablo viste de Prada' fue la guinda para que el nombre de Anne Wintour estuviera en boca de todos. Pero aún le quedaba mucha guerra por dar. La editora de Vogue fue nombrada dama del Imperio británico por su contribución a la moda y el periodismo y en 2017 consiguió el primer puesto de la revista Forbes como la mujer más poderosa del mundo.
A pesar de que en los últimos años su carrera profesional ha estado llena de rumores de posibles cambios o despidos, la verdad es que Condenast, la editorial a la que pertenece Vogue, la nombró hace ya un año editora indefinidamente. ¿Eso qué quiere decir? Que es ella misma la que decidirá cuando ha llegado el día de retirarse.
