Concha Velasco lo ha pasado francamente mal al verde obligada otra vez a vender su casa para pagar su deuda con Hacienda. Reconoce que ha "llorado mucho", pero mantiene la esperanza en que todo ahora le empiece a ir mejor: "De todo se sale". Lo ha contado en la revista 'Semana'.
Esta no es la primera vez que Concha ha tenido que vender su casa para responder a sus obligaciones con la Agencia Tributaria. Ahora reside en un piso de alquiler.
Además de mi casa, he tenido que vender mis joyas y mis cuadros. Cuando lo pienso me pongo triste
"Además de mi casa, he tenido que vender mis joyas y mis cuadros. Cuando lo pienso me pongo triste", ha asegurado. A pesar de todo, la actriz es optimista y mira al futuro con una sonrisa: "A los 79 años empiezo de cero, pero ya no tengo ninguna deuda. Puedo dormir de tranquila”.
La casa que ha tenido que vender se encuentra en la calle de Princesa de Éboli de Madrid. "Ya no tengo ninguna deuda, puedo dormir tranquila. Me ha costado reponerme, pero aquí estoy", asegura en la entrevista.
Sus problemas económicos empezaron cuando estaba casada con su exmarido, Paco Marsó. Ambos estuvieron 25 años. Cuando pasaron por el altar, en 1977, el actor se encargó de gestionar el patrimonio y los negocios de la actriz, y lo hizo bastante mal.
Ella misma dijo que aunque su relación amorosa fue muy bien, ocasionó un duro golpe a su economía. Como ella misma confesó en alguna ocasión, su relación fue nefasta para su economía. "Al divorciarme he ganado que cuando suena el timbre de casa no piense que es una citación judicial", dijo ella anteriormente.
