La familia Alba ha puesto en alquiler su casa de Marbella (villa Las Cañas), una de las propiedades preferidas de la duquesa de Alba en la que pasó tantas vacaciones de verano junto a su primer marido, Luis Martínez de Irujo, y sus seis hijos. Un negocio que reportará elevados beneficios, casi medio millón de euros al año, que se suma al otro nuevo negocio que tiene la familia Alba que se acaba de conocer.
Como os contamos en ‘Vozpópuli’, el duque de Alba, Carlos Fitz-James Stuart, ha conseguido convertir en apartamentos turísticos dos edificios que tienen la calle Princesa en los números 22 y 24, junto al Palacio de Liria, donde él vive, cerca de plaza de España. Una operación que podría generarle unos 2 millones de euros anuales y que viene envuelto en polémica ya que ha provocado un gran malestar en las empresas que ocupaban las oficinas de dichos inmuebles.
La familia Alba alquila su casa de Marbella por 35.000 euros al mes
Los hijos de Cayetana Fitz-James Stuart, la duquesa de Alba, han decido alquilar por 35.000 euros al mes la mansión que tienen en Marbella, a pie de playa, en la playa de Casablanca, según publica ‘Semana’. Un negocio con el que podrían obtener unos beneficios de cerca de medio millón de euros al año.
La duquesa de Alba repartió en vida su extensa herencia. Esta casa de Marbella la heredó Fernando Martínez de Irujo, el marqués de San Vicente del Barco, el cuarto hijo de la duquesa de Alba. Aunque se trata de la fortuna privada de Fernando, este consultó con sus hermanos su decisión de alquilarla y recibió su apoyo, según el citado medio, sobre todo de Eugenia Martínez de Irujo que era quien más solía ir a esta casa con su marido Narcís Rebollo y con su hija Tana Rivera.
La duquesa de Alba adquirió esta propiedad en 1963, año en el que pasó su primer verano de vacaciones junto a su primer marido, Luis Martínez de Irujo y Artázcoz, padre de sus seis hijos. La aristócrata presentó en sociedad su mansión en la revista ‘¡Hola!’, donde salía descalza y posando con su hijo Cayetano Martínez de Irujo, el conde de Salvatierra, cuando este tenía tan solo cinco meses de vida. En aquel entonces la casa solo tenía una planta pero con los años construyeron otras dos más, convirtiéndola en una villa de lujo.
La duquesa de Alba, que era una gran aficionada a las puestas de sol, no se perdía ninguna desde su diván. Cayetana Fitz-James Stuart encontró en esta espectacular casa, su refugio preferido, alejado de la Marbella de las fiestas y la jet set.
Su hija, Eugenia Martínez de Irujo, también pasó aquí muchas de sus vacaciones de verano con su madre, con su hija Tana Rivera o sus parejas. También disfrutaron de esta casa el segundo marido de la duquesa de Alba, Jesús Aguirre, y su tercer marido, Alfonso Díez, su viudo.
Fernando Martínez de Irujo heredó esta villa de lujo de Marbella, Las Cañas
Sin embargo, en el año 2009, la Demarcación de Costas abrió un expediente a su chalet y los abogados de la aristócrata batallaron para indultar la parte de la vivienda que invadía el espacio público en 32 metros cuadrados. El hijo de la duquesa de Alba, Fernando Martínez de Irujo, que es abogado de profesión, estuvo encima del contencioso para conseguir su indulto.
En junio de 2014, cinco meses antes de la muerte de la duquesa de Alba, el 20 de noviembre de 2014, Fernando puso fin al contencioso y logró que la villa de Marbella quedara fuera de peligro al menos por 30 años tras otorgarse una concesión temporal para la aplicación de las disposiciones transitorias de la Ley de Costas.
Manchego no nacionalista.
EL DECLIVE DE LA NOBLEZA En que cabeza cabe que los Albas acabáran alquilando sus mansiones.