Prácticamente aislada en el palacio de Windsor, donde ya se recluyó en 2020 durante el confinamiento, la reina Isabel II pasa los últimos días de uno de los años las difíciles de su vida. Un año en el que, entre otras cosas, ha tenido que despedirse del que fuera el gran amor de su vida.
La muerte de Felipe de Edimburgo el pasado mes de abril supuso un duro golpe para la monarca, quien este 2021 se ha enfrentado tanto a dolorosas perdidas, como a complicadas situaciones familiares, en un año difícil tanto para su país como para el resto del mundo, que aún sufre las restricciones y consecuencias provocadas por la pandemia del coronavirus.
Se cierra un año en el que, como es habitual en ella, Isabel II ha demostrado la fuerza y la entereza que le caracteriza, a pesar de que su salud se ha visto de lo más afectada. Por primera vez en su vida, y a sus 95 años, diferentes achaques han obligado a la reina a cancelar parte de su agenda oficial, delegando sus tareas en otros miembros de la Casa Real.
Una Casa Real que, aunque intenta mostrar su unión y su mejor cara, no pasa por su mejor momento. El distanciamiento del príncipe Harry y Meghan Markle con la familia es más evidente que nunca, el príncipe Carlos se vio salpicado por las acusaciones de supuesto racismo hacia Meghan, y la denuncia por acoso sexual hacia el príncipe Andrés no han hecho más que añadir preocupaciones a la reina Isabel en el año previo a su Jubileo.
Y es que en 2022, la reina cumplirá 70 años al frente del Estado Británico, una ocasión que espera celebrar por todo lo alto, aunque muchos son los que ven en su delicado estado de salud y en la actual situación sanitaria un impedimento.
Repasamos estos y otros momentos que han rodeado a la reina Isabel II este 2021, ya considerado uno de sus años más difíciles.
La muerte de Felipe de Edimburgo
Sin duda alguna, la muerte de su marido, Felipe de Edimburgo, supuso uno de los golpes más duros de su vida. Tras 73 años de matrimonio, Isabel y Felipe se despedían el pasado 9 de abril. Tras 28 días hospitalizado, Felipe fue dado de alta para regresar al castillo de Windsor donde falleció a los 99 años. Días después, el jefe del servicio médico del Palacio de Buckingham aseguraba que el marido de la Reina había muerto por su avanzada edad, y no por una enfermedad concreta.
Se conocieron cuando Isabel tenía 13 años y Felipe 18. Cuatro años más tarde, volvieron a coincidir e iniciaron una relación que culminó en una gran boda celebrada en la abadía de Westmister el 20 de noviembre de 1947. A pesar de los rumores y crisis que se le ha atribuido al matrimonio a lo largo de los años, tuvieron cuatro hijos y formaron una gran familia. Cuentan que Isabel no se separó de la cama de su marido hasta su fallecimiento.
Sus problemas de salud
En los últimos meses, la salud de Isabel II se ha convertido en una gran preocupación, no solo para su familia, sino para todo el país. Por primera vez, la Reina cancelaba varios actos previstos en su agenda oficial, aquejada de diferentes dolencias.
El pasado octubre, Isabel suspendía por sorpresa su viaje a Irlanda de Norte. Una decisión tomada tras la recomendación de descansar de su equipo médico. Fue entonces cuando la Reina era ingresada en el hospital privado King Edward VII de Londres, despertando aún más dudas sobre su estado de salud.
Aunque poco después la reina reaparecía y se aseguraba que se encontraba perfectamente, poco después volvían a cancelarse nuevos actos como la inauguración de la cumbre del clima en Glasgow, una de sus principales citas el año. Su avanzada edad y el debilitado aspecto que luce en los últimos tiempos, tiene preocupados a todos.
El Jubileo de la Reina
A pesar de sus problemas de salud, Isabel II tiene mucha ilusión por celebrar el próximo año su Jubileo de Platino. Según han asegurado fuentes oficiales, tendrá lugar el próximo mes de junio y se convertirá en un festejo por todo lo alto. Y es que la ocasión lo merece. La Reina celebrará sus 70 años como monarca, convirtiéndose en el reinado más largo de la historia británica.
Si la situación lo permite, están previstos numerosos actos. Espectáculos, desfiles, grandes fiestas en la calle e incluso viajes que realizarán los miembros de la casa real por todo el país para celebrar este reinado histórico.
El distanciamiento del príncipe Harry y Meghan Markle
Aunque fue en 2020 cuando el príncipe Harry y Meghan Markle decidieron abandonar Inglaterra para instalarse en Los Ángeles, este 2021, la brecha entre los duques de Sussex y la familia real británica se ha hecho más evidente. Aunque durante meses los rumores sobre una mala relación sobrevolaron a todos los miembros, fue una entrevista concedida por Harry y Meghan a la todopoderosa Oprah Winfrey la que hizo temblar los cimientos de Buckingham Palace.
Con una gran expectación, los duques de Sussex aparecían ante las cámaras de la CBS para desvelar interesantes e incluso escandalosos aspectos de su vida junto a la familia real británica. Las acusaciones de racismo de Meghan Markle hacía un miembro de la casa real, cuyo nombre no quiso confesar (aunque más tarde relacionaron con el príncipe Carlos), dieron la vuelta al mundo.
La mala relación entre los príncipes Harry y Guillermo también ha sido muy difícil para la reina Isabel, quien aún no conoce en persona a su bisnieta Lilibet, la hija de los duques de Sussex que nació el pasado mes de junio.
El príncipe Andrés, acusado de abusos sexuales
Sin duda, otro de los duros momentos para la reina Isabel fue la demanda por abuso sexual contra su hijo, el príncipe Andrés. Unas acusaciones ante las que la monarca apoya totalmente a su hijo. Según asegura la prensa británica, Isabel ha pagado de su fortuna personal el dinero necesario para la defensa del príncipe Andrés.
Según publicaron los medios estadounidenses, el hijo de la reina Isabell ha sido denunciado por Virgina Giuffre quien asegura que cuando tenía 17 años fue forzada a mantener relaciones sexuales con el príncipe Andrés por orden de Jeffrey Epstein, el magnate acusado de gestionar una red de tráfico de menores.
